Una nueva vacuna se sumará a las diez que actualmente están registradas en la OMS dentro de las fases de pruebas en seres humanos. Los resultados del antígeno de Janssen han sorprendido en fase preclínica y las pruebas se adelantaran para seguir trabajando en las posibilidades de este inyectable.
En un primer momento, la farmacéutica había calculado el inicio de las pruebas en seres humanos para el mes de septiembre. Sin embargo, el potencial mostrado por la vacuna en las investigaciones iniciales ha provocado que se adelanten los plazos casi dos meses, comenzando las pruebas en la segunda quincena de julio.
La compañía ya ha realizado el trabajo de reclutamiento de pacientes. Se someterán a los ensayos 1.045 personas y las investigaciones se realizarán tanto en Estados Unidos como en Bélgica.
Junto a estos resultados, el reto paralelo que existe en la búsqueda del antídoto del Covid-19 es conseguir la capacidad de producción de millones de dosis para distribuir por todo el mundo. Paul Stoffels, vicepresidente del Comité Ejecutivo y Director Científico, Johnson & Johnson (matriz de Janssen), se refirió a este reto reincidiendo en que la farmacéutica fabricará a riesgo. "Continuamos nuestros esfuerzos para construir asociaciones globales importantes e invertir en nuestra tecnología de producción de vacunas y capacidades de fabricación. Nuestro objetivo es asegurarnos de que puede entregar una vacuna al mundo y proteger a las personas en todas partes de esta pandemia".
El compromiso fabricación de la compañía se mantiene respecto al comunicado cuando comenzaron los ensayos con esta vacuna. Se busca desarrollar 1.000 millones de dosis que se distribuirían a lo largo de 2021 si la vacuna recibe el visto bueno de las autoridades sanitarias. En la actualidad, la compañía está dentro de uno de los programas del Barda, la agencia estadounidense que está invirtiendo en distintos proyectos de investigación contra el Covid-19.