Es posible que 2020 vaya a ser un año de consolidación digital para una gran parte de empresas. No hay que obviar que la idea de la transformación digital está resultando abrumadora para muchas organizaciones. El reciente informe Prioridades del CIO en su viaje digital, de IDC Research, destaca que las organizaciones deben reinventar sus tecnologías de la información (TI) para aprovechar "la ola más potente de esa transformación digital". Esta necesidad la enmarca dentro de "una economía de innovación multiplicada y basada en tecnologías emergentes".
Para 2027, IDC Research calcula que tres cuartas partes de las organizaciones europeas van a haberse transformado digitalmente y serán similares a las nativas digitales. "Si no lo hacen, no van a poder competir. Para ello, la gestión de los datos va a ser un elemento diferenciador entre organizaciones", advierte el mencionado informe. Prevé que, en 2020, la mitad del gasto tecnológico va a estar relacionado con los datos y que la esfera de datos mundial crecerá para 2025 hasta los 163 zettabytes (un billón de gigabytes), diez veces los datos generados en 2016. Todos estos datos permitirán desarrollar un nuevo mundo de oportunidades de negocio.
El 68% de los encargados en las compañías de incorporar las últimas TI, según el documento, ya tiene una estrategia híbrida. Es decir, combina el Cloud, el almacenamiento en la nube, con el on-premise, que es cuando la empresa instala una solución de software dentro de sus servidores e infraestructuras. Así, los modelos de consumo en formato Cloud se consolidan como el principal pilar donde se apoyarán las arquitecturas TI en estos próximos años. El 40% del gasto core de TI estará relacionado con Cloud en 2022 y aumentará hasta el 80% en 2028.
En todas partes
El almacenamiento en la nube ha pasado de ser una comodidad a una necesidad. Avanzamos hacia un nuevo modelo de trabajo donde la confianza, la responsabilidad, la flexibilidad y la creatividad son valores intrínsecos para el éxito. El Cloud ofrece como ventajas a las compañías, entre otras, la agilidad y capacidad de crecimiento y la escalabilidad que acelera el time to market y hace a las áreas de negocio más eficientes y rápidamente escalables.
El Cloud, por el cual la información se encuentra en todas partes, no sólo en un rincón del despacho, es el gran impulsor de la movilidad empresarial. Podemos disponer de nuestros archivos, trabajar con ellos, enviarlos y compartirlos con otras personas desde cualquier dispositivo y en cualquier momento y lugar. No se depende de un ordenador o dispositivo concreto para tener un documento a mano.
Sólo son necesarias soluciones tan fáciles de implementar como la Oficina Conectada de Vodafone para que los empleados de cualquier empresa, hasta los de las más pequeñas, pueden llevar a cabo sus tareas sin necesidad de estar presentes físicamente en su oficina. La transformación del entorno de trabajo realmente se produce cuando el espacio físico, la tecnología y los comportamientos humanos se potencian para crear entornos flexibles, móviles y colaborativos que fomenten la innovación y la creatividad. Cuando la información está disponible y actualizada, aumenta la productividad.
Con la Oficina Conectada, los trabajadores disponen de herramientas de productividad y colaboración en lo que ofimática, videollamadas y almacenamiento se refiere. Están alojadas en la nube, por lo que pueden trabajar en tiempo real con GSuite. Se obtiene un entorno colaborativo. Asimismo, su servicio de centralita virtual posibilita el no perder llamadas y atender correctamente a los clientes optimizando recursos, sin necesidad de hacer grandes inversiones en infraestructuras.
Las empresas deben apostar por servicios de seguridad en este nuevo concepto de oficina hacia el que nos dirigimos. Si este nuevo entorno de trabajo en movilidad no tiene garantías de seguridad, las nuevas herramientas y formas de efectuar nuestras tareas no servirán para nada. Con la Oficina Conectada de Vodafone, se trabaja desde la distancia en un entorno de seguridad digital total.
