
La subgobernadora del Banco de España, Margarita Delgado, instó a que reguladores y supervisores vigilen y actúen para determinar los efectos que puede tener Libra, la moneda de Facebook, en la economía global y en el sector financiero.
Delgado, que inauguró el miércoles el II Foro de Banca organizado por elEconomista y patrocinado por Grupo Oesía, denunció que la entrada en funcionamiento de forma no controlada de Libra puede amenazar la estabilidad de la economía y puede impactar de forma negativa en la cuenta de resultados de los bancos.
"El desafío es de tal magnitud que no podemos esperar pasivamente a determinar sus efectos, ya que podría llegar a convertirse en un elemento desestabilizador de la economía", destacó.
Delgado apuntó que la nueva moneda demanda una actuación internacional coordinada que elimine la menor oportunidad de arbitraje. Así, recordó que el G-7 ya ha puesto en marcha un grupo de trabajo, que comenzará este otoño, para someter a Libra a unos estándares regulatorios y de supervisión exigentes. Desde el Banco de España consideran que esta divisa virtual supone riesgos muy destacados como la falta de protección de los consumidores.
"No es evidente que los acuerdos contractuales que gobiernen el funcionamiento de Libra sean lo suficientemente transparentes como para permitir que sus usuarios entiendan bien los riesgos a los que están expuestos", aseveró al respecto. Del mismo modo, puso en duda la capacidad de la moneda para salvaguardar la privacidad de los usuarios toda vez que se acumulan grandes cantidades de información económicamente valiosa que supone un incentivo para los delincuentes cibernéticos.
Prevención del blanqueo
La número dos del organismo supervisor también llamó la atención sobre la cobertura que puede dar Libra a las actividades de blanqueo de capital y la financiación del terrorismo. "Resulta problemático detectar anticipadamente conductas delictivas, cuando las transacciones internacionales se pueden ejecutar con tanta rapidez", aseveró.
Respecto a la estabilidad del sector financiero, Delgado apuntó que la divisa podría ser un factor que amplificase la volatilidad de los mercados financieros, afectando al negocio de pagos y la actividad de la toma de depósitos de los bancos "con la consiguiente erosión de su cuenta de resultados". La subgobernadora señaló que la moneda no cuenta con acceso a mecanismos de provisión extraordinaria de liquidez de emergencia, lo que podría agravar las tensiones que sobre el sistema financiero puedan ocasionar problemas diversos, como los de origen operativo o de pérdida de confianza en la misma.
Finalmente, mostró su preocupación de que Libra suponga la emergencia de circuitos paralelos para la movilización de recursos financieros de las economías, debilitando así el euro y otras divisas fuertes como activos de liquidación seguros.
Nuevos jugadores
La subgobernadora del Banco de España, por otro lado, también avisó del reto que supone para la banca la entrada de las grandes tecnológicas (bigtech) en el negocio financiero y la necesidad de acelerar la transformación digital del sector para entrar a competir con ellas. Margarita Delgado reseñó que el fenómeno de las bigtech tiene dos caras, por un lado, contribuyen a ampliar la oferta de servicios financieros y mejorando su acceso, pero por otro, también entrañan riesgos. Así, subrayó la necesidad de una supervisión adecuada sobre estos negocios en el que los intermediarios no asumen responsabilidad alguna respecto al buen fin de las transacciones.
Según la número dos del organismo, la entrada de estos nuevos jugadores y la nueva forma de actuar de la banca a través de Internet, podría llevar a que algunas entidades pierdan el contacto con la clientela, quedándose relegadas a realizar labores administrativas, lo que podría comprometer una de las ventajas competitivas del sector: los datos de los clientes.
"Necesitan mantener este acceso a los datos, para lo cual es necesario preservar unos altos estándares de cumplimiento de las normas y de las mejores prácticas de privacidad y gestión de información", dijo. Puesto que, según Delgado, la acumulación de esta información en pocas plataformas tecnológicas puede colocar en una situación de desventaja competitiva al sector financiero en la prestación de una amplia gama de servicios.
De este modo, concluyó que el sector financiero está llamado a reinventarse para seguir siendo relevante y en dicho reto destaca por encima de todo la importancia del acceso a los datos, clave para el futuro del negocio bancario.