
La Generalitat de Cataluña ha modificado las prioridades de reparto de publicidad institucional entre los medios catalanes afines al soberanismo. Un nuevo modelo que ha beneficiado al grupo Godó, al diario Público y a los pequeños medios locales y de ocio en detrimento de los grupos editoriales que históricamente se han mostrado más cercanos a las políticas soberanistas. Entre ellos destaca Ara, del empresario Fernando Rodés y la familia Carulla (Gallina Blanca), El Punt Avui, del empresario gerundense cercano a Carles Puigdemont, Joaquim Vidal, o de páginas web independentistas como Vilaweb o Directe.cat.
Así, pese a que el Ejecutivo regional ha incrementado la partida para publicidad un 5,6% hasta los 32,5 millones de euros, los principales grupos catalanes han visto como sus ingresos por anuncios institucionales caían entre un 35 y un 45% en apenas un año, mientras que publicaciones periódicas como Cerdanyola al dia duplicaba los fondos que recibía de la Generalitat y el medio impreso La República se llevaba más de 41.000 euros frente a los cero euros de 2017.
En concreto, según la memoria publicada, la Generalitat ha regado a la dueña de La Vanguardia con 5,3 millones de euros en publicidad institucional, lo que supone un 18,5% más que en 2017, cuando recibió el 10,1% menos. Estas cifras coronan a la editorial del Conde de Godó como el grupo que más ha recibido en publicidad y la única que crece de los grandes grupos catalanes de medios. En este punto, la Memòria de la Comissió Assessora sobre la Publicitat Institucional recoge que los medios de El Punt Avui, incluyendo papel, web y televisión, se han llevado 1,8 millones de euros, el 45,5% menos. Este medio, junto a TV3 fue de los pocos que no se negó a publicar la publicidad del referéndum independentista ilegal celebrado en 2017. En esta línea, el grupo Ara, que sí que se negó, ingresó en 2018 por publicidad institucional 1,07 millones de euros, el 35,8% menos.
Por su parte, el grupo Zeta, la dueña de El Periódico, facturó por este concepto 1,25 millones de euros, un 43,5% menos que en 2017 y menos de la mitad de los 3,8 millones que llegó a sumar en 2016. En cuando a las pequeñas web independentistas, Vilaweb.cat recibió el 48,9% menos y Directe.cat el 60% menos. En esta línea, la única web que ha recibido más, más allá de Público.es, es Naciódigital.cat, que ha crecido el 13,7% a los 317.461 euros. Por su parte, Nacional.cat se ha coronado como la que más ingresa con 408.668 euros, superando a Lavanguardia.es, elPeriódico.com o Ara.cat.
Ejercicio convulso
El año 2018 ha sido un ejercicio raro para la Generalitat de Cataluña ya que arrancó con el artículo 155 de la Constitución en vigor, lo que daba el control de los gastos y los ingresos al Gobierno central (lo único que no tomaron fue el control de la televisión autonómica). El Ejecutivo, por aquel entonces en manos de Mariano Rajoy, congeló las subvenciones a la prensa y la publicidad institucional en 2017 pero finalmente tuvo que repartirlas porque ya se habían adjudicado y había contratos marco firmados.
En 2018 continuó con la política de austeridad en cuanto a la publicidad institucional y las ayudas y a abril solo había convocado los anuncios de La Grossa, la Lotería catalana. En junio, con el cambio de Gobierno, el Ejecutivo regional de Joaquim Torra recuperó las riendas de la gestión de la Generalitat y pudo volver a repartir publicidad y convocó el reparto de las subvenciones al catalán, que se publicaron a finales de julio de 2018.