
ACS se desprenderá de sus participaciones de control en seis autovías de peaje en sombra en España. El valor de estos activos, ubicados en Cataluña, Galicia, Castilla y León, Navarra y Castilla-La Mancha, se estima por encima de los 300 millones de euros. El grupo que preside Florentino Pérez ha contratado a BBVA para asesorar la operación.
Las seis carreteras incluidas en la desinversión son la A21-Autovía del Pirineo, en Navarra, la Autovía de la Mancha (Castilla-La Mancha), la Autovía AG-56 Santiago-Brión (Galicia) y el Eje Diagonal y la Autovía C-14 Reus-Alcover, ambas en Cataluña, según informan fuentes del mercado a elEconomista. Fuera del perímetro de venta quedan la A-308 Iznalloz-Darro, en Andalucía; la Autovía Medinaceli-Calatayud, que discurre por Castilla y León, Castilla-La Mancha y Aragón, y la Autovía del Camp del Turia CV-50 (Comunidad Valenciana).
Las seis autovías a las que ACS ha puesto el cartel de venta están gestionadas a través de su concesionaria filial Iridium bajo la modalidad de peaje en sombra. Este sistema implica que la empresa construye y financia la carretera y la Administración paga anualmente un canon en función del tráfico y la disponibilidad. Así, los usuarios no pagan directamente, sino que su conservación se costea vía impuestos.
En conjunto, las seis infraestructuras suman 214 kilómetros de longitud y una inversión total de 1.049,2 millones de euros. ACS ostenta participaciones de control en todas ellas, oscilando entre el 63,33 por ciento y el 100 por cien (ver gráfico). Cuatro de las autovías son de titularidad del Estado y dos, de la Generalitat de Cataluña. Son contratos, todos ellos, con una larga vida de concesión, con vencimientos entre los años 2033 y 2042.
ACS acordó hace cuatro años el control conjunto de las seis concesiones con el fondo de infraestructuras holandés DIF. Aquel pacto se incluía dentro de una operación superior por la que la firma que lidera en España Fernando Moreno adquirió por 179,88 millones el 80 por ciento de las participaciones de Iridium en el Hospital Puerta de Hierro, en uno de los tramos de la línea 9 del Metro de Barcelona y en los intercambiadores de Plaza de Castilla, Príncipe Pío y Avenida de América, en Madrid. Estos activos serán ahora traspasados por DIF, que ya ha recibido las ofertas vinculantes de Aberdeen, Brookfield y Equitix.
ACS, que ya barajó la venta el verano pasado de sus peajes en sombra, espera recibir en las próximas semanas las ofertas de potenciales compradores, entre los que figuran fondos de infraestructuras internacionales. Está descartado el traspaso a Abertis, toda vez que la concesionaria que controlan ACS y Atlantia tiene el foco en vías de pago directo. Además de estas autovías, el grupo tiene en venta el 10 por ciento en la concesionaria de estaciones de los tramos II y IV de la Línea 9 del Metro de Barcelona, como ya avanzó este diario el 12 de julio.