
Con 48 millones de habitantes y una posición geográfica estratégica al estar en el centro del Continente americano, Colombia se ha convertido en uno de los destinos oportunidad para las franquicias españolas que quieren hacer las américas. Una oportunidad que se presenta tanto de puertas para adentro del país como para fuera, dada la buena relación del Gobierno de Bogotá con el resto de países de América Latina, EEUU y Canadá. Más noticias en la revista gratuita elEconomista Franquicias
Una de las ventajas que Colombia presenta para las franquicias españolas es que el país cuenta con muchas regiones donde nuestras enseñas podrían implantarse con altas garantías de éxito, dado el índice poblacional. En esa lista figuran la capital del país, con nueve millones de habitantes; Medellín, con seis millones; así como Cali, Barranquilla y Cartagena.
A ese amplio abanico de posibilidades geográficas se unen las razones económicas, políticas y culturales por las que las franquicias españolas podrían encontrar en Colombia un buen caldo de cultivo para crecer. Según explica Adriana Rivera Heredia, presidenta de Rivera Franquicias SAS, entre las razones políticas está la estabilidad de Colombia desde hace décadas.
Auge de la clase media
En el plano económico, Rivera recuerda que Colombia ha sido catalogada por el Banco Mundial como el primer lugar para hacer negocios en América Latina, siendo su capital, Bogotá, la sexta mejor ciudad para dicho propósito. "No hay que olvidarse de que en Colombia está creciendo la clase media y, por tanto, el poder adquisitivo", recuerda Rivera. Algo que, a su juicio, "también vendría muy bien al desarrollo del negocio de las franquicias españolas que apostasen por Colombia en el panorama internacional".
El incremento de esa clase media podría estar, de hecho, en el origen de la inversión extranjera que cada año aterriza en la región. De hecho, el país es el cuarto de América Latina que más inversión extranjera recibe, especialmente por el tirón de su industria turística y de los sectores que cuelgan de la rama del turismo, como infraestructuras, hoteles o sector inmobiliario.
Todos esos segmentos han contribuido precisamente a que España ya sea el segundo país extranjero que más invierte en Colombia de todo el mundo, sólo por detrás de EEUU. De ahí que, según Rivera, "en Colombia ya hay muchos españoles trabajando y viviendo".
La presencia de la gran colonia española en Colombia se debe también, según puntualiza esta ejecutiva, a la proximidad cultural. "Los colombianos somos los más parecidos a los españoles en América Latina, porque además de idioma tenemos gustos similares respecto al concepto de negocio. La adaptación de un negocio español en Colombia es mínima", subraya.
Eso sí, pese a estas ventajas, nuestra protagonista admite que para llegar a Colombia lo mejor es hacerlo de la mano de un masterfranquiciado local. De ahí que su recomendación pase por tener entre tres y cuatro masterfranquiciados en función de los departamentos a los que quiera llegar. "Colombia ocupa un territorio muy grande. Este y oeste no tienen nada que ver, y sur y norte tampoco", advierte.
Independientemente del número de masterfranquiciados, Rivera explica que en su país de origen los inversores encajan en dos perfiles diferenciados. "Puede haber grupos empresariales familiares interesados en invertir en la licencia de explotación de una franquicia; y también hay inversores individuales", sostiene. Para contactar con ambos, la empresaria recuerda que lo mejor es tirar de contactos. "En Colombia se hacen muchos negocios por recomendación", explica.
A la hora de analizar los sectores más favorables para acoger marcas franquiciadoras españolas, Rivera recuerda que en Colombia los sectores con más tirón son restauración, alimentación y moda. A estos se han sumado en los últimos años otros sectores vinculados a la cosmética, la estética, la educación, las peluquerías o los gimnasios.
Sea cual sea la franquicia que quiera llevar su marca a Colombia, Rivera recomienda que los locales estén en centros comerciales o en parques empresariales "pese a que los alquileres en esas ubicaciones son más caros", advierte. En este sentido, a su juicio, el coste del alquiler de un buen local es una de las razones que está frenando el nivel de inversión en el país.
No sólo el coste. Pese a que puedan o quieran pagarlo, muchas empresas encuentran dificultad para dar con locales disponibles porque cada vez hay más entidades extranjeras que buscan implantarse allí.
A día de hoy, en Colombia hay 39 marcas franquiciadoras españolas con 258 establecimientos, principalmente en las ciudades de Bogotá y Medellín. De hecho, en el último informe de La franquicia española en el mundo, de la Asociación Española de Franquiciadores, Colombia aparece entre los diez países con más franquicias españolas en el mundo.