
El pasado año, 608 trabajadores murieron en accidente laboral, 28 más que en 2014, lo que supone un aumento en términos relativos del 4,8%, según datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
Del total de fallecidos, 500 se produjeron durante la jornada de trabajo, 33 más que en 2014, lo que implica un repunte del 7,1%. Mientras tanto, los 108 accidentes mortales restantes registrados en 2015 fueron in itínere, es decir, aquellos que tuvieron lugar en el trayecto de casa al trabajo y viceversa.
Por otro lado, se contabilizaron 518.988 incidentes laborales con baja, lo que supone un aumento del 5,7% respecto al número de siniestros de 2014. Del conjunto de percances, 449.223 se registraron en el lugar de trabajo y 69.765 fueron in itínere.
Repunte en construcción
La industria manufacturera registró el mayor número de accidentes con baja en jornada de trabajo, al aglutinar 82.087 siniestros, seguido del comercio mayorista y minorista y reparación de vehículos a motor, con 64.417 siniestros; la construcción, con 47.228 accidentes, y la hostelería, con 41.913. Los mayores repuntes se dieron en la construcción, con un aumento del 9,7%.
Por el contrario, las industrias extractivas fueron las que más recortaron su volumen de percances, con un 4%, seguida de las actividades administrativas, que se redujeron un 3,6%.