Qué es el cronotrabajo, la técnica de las empresas para adaptar los horarios a las necesidades de cada trabajador

Cada vez son más las empresas que permiten a los trabajadores flexibilizar su horario laboral con el objetivo de conciliar con su vida personal, por ejemplo, en el caso de tener hijos. Sin embargo, esta práctica se extiende cada vez más con el objetivo de que cada trabajador se adapte el horario según su ritmo de vida o respecto a sus rutinas de sueño.

Esto, concretamente, lo que se conoce como cronotrabajo, una modalidad de trabajo flexible en la que el empleado es el que adapta su jornada laboral y su horario según sus propias necesidades. Así, esta modalidad de horarios flexibles de trabajo se adaptan al ciclo circadiano de cada persona, haciendo la jornada completa, pero en el horario que más se adapte a cada uno, en lugar de implementar un horario cerrado para todos.

Beneficios del cronotrabajo

De hecho, esta práctica es una forma muy beneficiosa de mantener contentos a los empleados, que podrán aumentar su productividad y mejorar su conciliación con el tiempo libre y de descanso, según las necesidades vitales de cada uno, algo relacionado directamente con la mejora de la salud mental.

"El simple hecho de dar el poder de elección al profesional ya es un aliciente para aumentar la motivación, mejorar la calidad de sueño e incrementar la productividad. En definitiva, lo que esta tendencia pone de relieve es el deseo de los profesionales de moldear su vida laboral teniendo en cuenta sus necesidades personales, en lugar de que se les imponga", explica Fabián Tesorero, director asociado en la consultora especializada Walters People.

"Uno de los frenos a los que se enfrentan las empresas a la hora de implantar el cronotrabajo es el temor a la falta de control o la baja de productividad en los equipos", añade como reto a afrontar sobre este tipo de horarios.

De hecho, que sea horario flexible no significa que el trabajador cambie sus horas diaria o semanalmente, sino que el trabajador pueda elegir un horario fijo, pero atendiendo a sus necesidades, por ejemplo, estableciendo que siempre entrará antes de lo habitual y saldrá también antes, manteniendo siempre ese horario alternativo y liberándose del típico horario de oficina de 09.00 a 18.00 horas.