
"¿Estás seguro de que quieres estudiar eso? No tiene muchas salidas". "Deberías seguir en tu trabajo actual, tienes una nómina asegurada". "¿Por qué no pruebas con unas oposiciones?".
A los padres y a la familia se les quiere mucho, y aunque escuchar sus consejos siempre es positivo, hay veces en las que se enrocan por miedo a la incertidumbre y por procurar siempre nuestro nuestra mejor opción.
Sin embargo, esto puede llevar a recibir consejos no solicitados o que a veces sean demasiado insistentes. Existen formas de discutir decisiones profesionales con quienes familiares y amigos sin sentirte obligado a seguir todas sus sugerencias, según Thema Bryant, profesora de psicología en la Universidad de Pepperdine, quien ha tratado con este tipo de situaciones.
Ella aconseja tratar de la siguiente manera las conversaciones más habituales.
Si piensan que tu trabajo no es el adecuado
La experta recomienda decir cosas como: "Agradezco la confianza que tienes en mí y el deseo de que logre grandes cosas, pero con el mercado actual, esto es lo mejor que hay disponible. Voy a desarrollar mis habilidades aquí y no quiero seguir teniendo esta conversación sobre por qué estoy en este trabajo".
Si te preguntas por qué no les haces caso
"Conozco todos los puntos que has mencionado y los agradezco. No los olvidaré y los tendré siempre en cuenta, pero me gustaría que simplemente confiaras en mí".
Si te piden que busques un trabajo más seguro
"Entiendo vuestro punto de vista y que solo queréis que siempre me vaya bien, pero mi trabajo actual me da otras cosas además de seguridad. Estoy contento y disfruto haciéndolo. Si en el futuro deja de ser así, siempre tendré en cuenta vuestros consejos".
Incluso los padres con las mejores intenciones pueden excederse al dar consejos profesionales a sus hijos adultos. Al demostrar que has escuchado, pero también al afirmar que las decisiones sobre tu carrera te corresponden a ti, estás respetándolos pero también siendo honesto contigo mismo y con ellos.