La falta de mano de obra cualificada se ha convertido en un problema endémico que está lastrando el crecimiento de muchos sectores como el de las nuevas tecnologías, la hostelería o la construcción. En algunos casos por la alta demanda y en otros por falta de relevo generacional o la ausencia de formación específica para cubrir determinados puestos.
Aunque resulte paradójico, en Andalucía con 758.457 parados, faltan trabajadores para cubrir vacantes. Según datos de Adecco, casi el 53% de los directivos de recursos humanos tiene dificultades para encontrar talento para sus empresas.
Empresarios de la construcción, especialmente en el segmento de la vivienda de alta gama, llevan ya varios años advirtiendo de que no encuentran personal cualificado para cubrir sus necesidades. Las plantillas de operarios profesionales comienzan a envejecer y los empresarios no encuentran jóvenes suficientemente capacitados y con la experiencia necesaria para sustituirlos, a esto se suma la ausencia de formación específica para algunas profesiones especializadas que requieren conocimientos más técnicos.
"El relevo generacional es complicado y esto afecta de forma muy importante a nuestro sector, que además cada vez está más especializado. Es una situación que nos va a causar problemas a corto o medio plazo", comenta a elEconomista Andalucía Rafael Sánchez, presidente de Fadeco Contratistas.
Formación
La formación de nuevos profesionales es la clave para paliar esta situación que está lastrando el crecimiento de la construcción en un momento complejo marcado por la escasez de materias primas y las continúas subidas de precio de materiales y suministros.
"Estamos trabajando desde la Fundación laboral de la Construcción y las organizaciones empresariales a través de convenios con universidades, institutos, fundaciones para atraer a todos los jóvenes que podamos, formarlos y que puedan tener un trabajo de calidad en nuestro sector, pero actualmente hay dificultades y necesidades", apunta Sánchez.
Perfiles
Desde Fadeco insisten en que hacen falta profesionales prácticamente para todos los perfiles, sin embargo, son los más especializados los que más problema encuentran para localizar trabajadores.
Operarios especialistas en tabiquería seca, industrialización y montaje de fachadas prefabricadas, en colocación de instalaciones o en revestimientos especializados son algunos de los perfiles más buscados actualmente en la construcción, que también sigue demandando otros profesionales como carpinteros, especialistas en acero o jardineros.
Hostelería
Otro de los sectores que está mostrando dificultades para encontrar mano de obra cualificada es la hostelería, que afronta un verano con déficit de personal y previsiones de récord y de recuperación tras dos años de ralentización por la pandemia.
"La falta de personal formado viene siendo un problema endémico desde hace varios años, pero ahora se ha acentuado. Tenemos un gran déficit, no hay profesionales del sector, suplimos con jóvenes que están en sala y los vamos enseñando y formando, pero en la cocina es imposible enseñarlos en cuestión de días", advierte Francisco de la Torre Luna, presidente Federación de Empresarios de Hostelería Horeca Andalucía.
"Con el personal que sale de las escuelas públicas no se cubre ni el 15% de la demanda"
En el caso de la hostelería, algunas provincias como Málaga cuentan con varias escuelas que forman a los profesionales, pero los empresarios aseguran que no es suficiente para la demanda del sector.
"De las escuelas públicas salen unos 10-15 profesionales por curso, eso no cubre ni el 15% de la demanda del sector. En Córdoba llevamos más de cuatro años pidiendo al Ayuntamiento que nos ceda un espacio para poner en marcha una escuela de hostelería, pero aún no lo hemos conseguido", comenta el portavoz del sector.
Mejorar las condiciones laborales y facilitar la conciliación familiar de los trabajadores del sector son dos de los grandes retos a cumplir para captar a nuevos profesionales.
"Hay que hacer más atractivo el sector, trabajamos cuando todo el mundo está descansando, eso es muy duro. También hay que hacer pedagogía con los clientes para que los trabajadores puedan salir a su hora, hay que europeizar el sector, somos personas sirviendo a personas y eso hay que respectarlo, destaca De la Torre.
Camareros, camareros de piso, ayudantes de sala, pinches de cocina y cocinero son los perfiles más demandados del sector este verano.
Según indica el representante de los hosteleros, solo en la provincia de Córdoba, que acaba de terminar su temporada alta, han faltado alrededor de 600 trabajadores y la cifra se multiplica en otras provincias como Málaga, Cádiz, Huelva o Almería donde ahora comienza el mayor repunte de empleo.
Innovación
En cuanto a los sectores que precisan de una formación académica superior, uno de los que más empleo está generando y mayores dificultades está teniendo para cubrir la demanda es la innovación y el desarrollo tecnológico.
Perfiles de ciberseguridad, desarrolladores web, técnicos de comunicaciones y posiciones similares son los más buscados en un perfil que prácticamente alcanza el pleno empleo. La horquilla salarial de estos puestos oscila entre los 24.000 y los 35.000 euros y Málaga y Sevilla son las provincias que acaparan la mayor parte de las ofertas laborales.
Estudio de demanda
Una de las últimas compañías que se ha sumado recientemente al ecosistema tecnológico andaluz ha sido Capgemini, la multinacional francesa ha abierto un centro de ciberseguridad en Málaga y está buscando unos 300 profesionales para cubrir distintos puestos.
Con el fin de apoyar las decisiones de coordinación, impulso y planificación de la Formación Profesional (FP), la Consejería de Empleo ha realizado recientemente un informe para detectar las necesidades formativas de la región.
Según este estudio, las profesiones con mayor necesidad de personal cualificado son mecánicos-instaladores de refrigeración y climatización; conserveros de frutas y hortalizas y trabajadores de la elaboración de bebidas no alcohólicas; mecánicos y ajustadores de maquinaria agrícola e industrial; operadores de carretillas elevadoras; soldadores y oxicortadores; fontaneros; mecánicos y reparadores de equipos eléctricos; conductores de camiones; monitores de actividades recreativas y de entretenimiento; mecánicos y ajustadores de vehículos de motor; peones del transporte de mercancías y descargadores o electricistas de la construcción, entre otras.
Junto a estas ocupaciones, el informe también ha seleccionado 275 especialidades formativas consideradas como altamente demandadas en el mercado laboral, que se han dividido en tres grupos, señalando en el de prioridad alta un total de 50 que pertenecerían a sectores como el comercio y el marketing, el sector agrario, la hostelería y el turismo, los servicios socioculturales, la obra civil, la electricidad, la energía y el agua o el transporte.
Dentro de este grupo prioritario, el informe ha detectado en la familia de comercio sobresalen las relacionadas con el comercio internacional y con un alto componente tecnológico, la gestión logística o el comercio electrónico, mientras que en transporte prima la necesidad de conductores de vehículos pesados y mantenimiento de los sistemas eléctricos y electrónicos.
Empresarios y administración coinciden en destacar la formación especializada como base para hacer frente a la escasez de mano de obra y por tanto seguir reduciendo el desempleo.