El presidente del Gobierno en funciones inició ayer una mini gira para mantener una serie de reuniones informales con jefes de Estado europeos para analizar los resultados de las elecciones comunitarias, unos comicios que van a permitir a Pedro Sánchez lucir músculo ante sus colegas gracias al 32 por ciento de los votos logrados por el PSOE en España, la mayor victoria de unos socialistas en la Unión Europea. Todo ello mientras la depresión se profundiza en Unidas Podemos tras la debacle que la formación sufrió en las elecciones autonómicas y locales, razón por la que Ferraz, a día de hoy, descarta su entrada en el Gobierno.
Eso dio a entender ayer José Luis Ábalos, número tres de los socialistas, en la rueda de prensa celebrada tras una Comisión Ejecutiva Federal en la que se acordó crear una comisión para coordinar los posibles pactos de gobierno del PSOE en entidades locales y autonómicas. Aunque admitió que Podemos será uno de los "socios preferentes" de los socialistas, también dio a entender que las posibilidades de que se forme un gobierno de coalición con los socialistas está cada vez más lejana. Indicó que se podían dar "acuerdos programáticos, sin dar por supuesto nada ni excluir nada. Pero todos los partidos debemos ser humildes y ser realistas y saber qué nos han encomendado con el voto de las urnas".
Fuentes de Podemos asumen lo indicado por Ábalos, quien insistió en un gobierno socialista con independientes y progresistas. De ahí que en la formación morada estén dispuestos a conformarse con las migajas que les quieran dar los socialistas. Además, reconocen que deberán tener mucha cautela con lo que piden en el diálogo con el PSOE. No están en situación de romper la baraja y tendrán que conformarse con lo que ofrezca Ferraz. Un puesto en el Gobierno le permitiría salvar los muebles a Pablo Iglesias, pero lo cierto es que, ahora mismo, admiten que cualquier escenario es posible. Incluso apoyar al PSOE de balde.
Abiertas las puertas a Cs
La comisión de pactos está integrada por el propio Ábalos, Santos Cerdán -secretario ejecutivo de coordinación territorial-, Susana Sumelzo y Patxi López -secretario de Política federal-. Según explicó el número tres de los socialistas, esta comisión no hará propuestas de pactos, sino que evaluará las que le hagan llegar las delegaciones autonómicas y locales para determinar si se ajustan con "el proyecto del PSOE" y dar su visto bueno.
En este sentido, Ábalos no descartó llegar a un acuerdo con Ciudadanos en alguna de las regiones en las que los socialistas podrían dominar con el apoyo de los naranjas, como son los casos de de Castilla y León y Canarias.
"Mantendremos contactos con todas las fuerzas políticas, también Ciudadanos. La duda es si ellos van a contribuir al futuro o a la involución del país", en referencia directa al potencial pacto de los de Rivera con Partido Popular y con Vox en Madrid para dar Comunidad y Ayuntamiento a la derecha.
En cualquier caso, no dio "nada por perdido" y afirmó que los socialistas lo "pelearemos todo", incluso en regiones como la citada Madrid donde un pacto a la andaluza amarraría la gobernabilidad para el bando conservador.
Con todo, también avisó de que hay posibilidades que ni se plantean, y es que estos acuerdos puedan dar pie a gobiernos dependientes de "manos independentistas ni condescendientes con el independentismo". En este sentido, descartó un posible pacto con EH Bildu.
Gira europea
Mientras Ábalos solventa los asuntos patrios, Sánchez se reúne con los estadistas europeos para decidir, en gran medida, el futuro de la UE. La intención de estas cumbres informales, según informan desde Moncloa, es perfilar los nombres que renovarán los cargos en la Comisión y en otros órganos europeos. Los buenos resultados del PSOE, capitaneado por Josep Borrell, permiten a Sánchez disfrutar de una posición privilegiada para ello.
De ahí que los rumores sobre este reparto de puestos se hayan disparado en las últimas horas. Los más insistentes indican que Sánchez batallará por conseguir un puesto privilegiado en Bruselas para el todavía ministro de Exteriores Borrell, algo que permitiría, además, combatir las campañas del independentismo catalán en Europa desde la propia Comisión y con uno de sus más activos enemigos en el Ejecutivo socialista. Con este fin, hoy se reúne con Ángela Merkel, canciller de Alemania, y celebra una cena con jefes de Estado y Gobierno de la UE.