
Las principales bolsas se anotan ganancias de doble dígito en 2019. Pero eso no quiere decir que se disipen los riesgos por completo, ahora que un Brexit duro parece ya descartado y hay posibilidades de que EEUU y China cierren su guerra comercial. Pese a todo ello, conviene moderar el optimismo, porque las expectativas de beneficios de las cotizadas no dejan de caer.
El Ibex no es ajeno a ello hasta el punto de que es la única plaza europea donde las estimaciones decrecen para 2021 (6 por ciento). En este contexto es aconsejable centrarse en aquellas firmas que escapan a la tijera de los analistas, como Ferrovial, Iberdrola o Telefónica. La solidez de sus negocios y lo recurrente de sus ingresos los convierte en activos cuyo carácter defensivo aún es muy valioso.