
Hacienda reclama a Ikea 75 millones por el impuesto de Sociedades entre 2010-2014. Cuestiona deducciones fiscales en los servicios prestados por otras sociedades del grupo y el deterioro en determinados activos.
No obstante, los problemas del fabricante de muebles con el Fisco van más allá de España. De hecho, Bruselas ha abierto una investigación para determinar si Ikea alcanzó pactos con Holanda que la habrían permitido pagar menos impuestos.
En esta investigación tiene gran importancia un supuesto autopréstamo de 5.400 millones concedido entre sociedades del grupo en 2011 con el objeto de reducir su carga fiscal. Los problemas que Ikea mantiene en España y Europa reflejan que la firma recurre a una ingeniería fiscal a la que debe poner fin.