Lejos de lo que el cierre de su sede apunta, el fondo 3i redobla su apuesta por las infraestructuras de España. Así lo indica el acuerdo con la constructora Aldesa para forjar un consorcio y pujar por el Plan de Carreteras, dotado con 5.000 millones. La firma británica se une así a una serie de fondos (Aberdeen, DIF, Macquarie, Meridiam, Mirova o John Laing) que también se han sumado a constructoras para optar con más garantías a los diferentes proyectos.
El interés que estas firmas muestran por nuestras infraestructuras tiene lógica empresarial. Además de la dotación económica, los fondos pujan por unas infraestructuras que, al contrario que ocurre con las radiales, no precisan de alcanzar unos niveles mínimos de tráfico para hacer rentables las inversiones.