Editoriales

Más riqueza y mayor potencial por explotar

La riqueza financiera de las familias y empresas españolas sumó 1,3 billones al cierre de 2016, muy lejos de los 786.000 millones registrados en el apogeo de la crisis. Cifras así se han logrado gracias a crecimientos de dos dígitos, en los años en los que la recuperación empezó, que ahora se ralentizan hasta el 3%.

Es una moderación saludable, acorde con una situación económica más holgada, tras años en los que empresas y familias se concentraron en reducir deuda. Ahora bien, tener más activos disponibles no quiere decir que se aproveche todo su potencial inversor. Al contrario, la tenencia de fondos y acciones se desploma, mientras que los recursos conservados en simples cuentas y depósitos absorbe el 41% del total... y esa proporción crece.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky