Energía introducirá medidas para incrementar la transparencia en el sector. El objetivo es reforzar la posición del consumidor, dándole más información sobre los servicios contratados y sus derechos, y vigilar las prácticas de las empresas. La iniciativa es adecuada para resolver los problemas de la sociedad con su factura energética y va en línea con las prioridades de la UE.
También existe coincidencia en la apuesta por las renovables, mediante una subasta de 3.000 MW, a la que optarán todas las tecnologías verdes. Abrir el abanico a las diferentes opciones limpias permitirá elegir la posibilidad más barata con lo que se evitará caer en errores pasados, que todavía pagamos. Por tanto, el Ministerio abre una transición energética que sólo puede ser calificada como positiva.
