
Una de cada cinco empresas que se crean en España se establece en Madrid, que atrae 7 de cada 10 euros de inversión extranjera que recibe el país, y que en 2015 ha logrado que 730 firmas hayan trasladado su sede a la región.
Entre sus puntos fuertes destacan los menores costes laborales, la buena red de comunicaciones y la excelente política fiscal. Además, los ciudadanos tienen la renta per cápita más elevada de España, lo que permite ahorrar e invertir.
Pero lo más importante para las empresas que se instalan es que lo hacen en una región estable, con seguridad y libertad para hacer negocio. Virtudes imprescindibles para que Madrid sea un polo de atracción para la inversión, y de las que deberían tomar buena nota en otras regiones.