El importe de las emisiones de deuda pública previstas para el ejercicio han sido rebajadas por segunda vez. A ello contribuye la mejora de las condiciones de financiación a lo largo del año, que permite al Tesoro pagar un menor volumen de intereses por la deuda en circulación.
Así, según el anuncio realizado por el ministro de Economía, la colocación de bonos y letras se quedará por debajo de los 51.000 millones de euros. Guindos defiende que no sólo la bajada de los tipos permite este rebaja, sino la buena marcha de la economía, que se reflejará en el cumplimiento del objetivo del déficit en el 4,2 por ciento. Una cifra para sacar pecho ahora que Bruselas cuestiona, con las eleccciones de fondo, que España sea capaz de conseguir esta meta.
