
La elevada carga regulatoria que sufre la banca supondrá no sólo un freno a la financiación, sino también un encarecimiento de la misma. Es una de las conclusiones de los distintos representantes del sector, que participaron en la jornada 'Los desafíos de la Unión Bancaria', organizada por elEconomista junto con Cumbria y TIBCO.
Además, aseguran que es difícil gestionar el negocio porque cada 100 euros de exposición al riesgo (APR) hay que destinar 20 euros al capital. Una cantidad elevada que entorpece el negocio del crédito del que se nutren las entidades financieras. Por ello, es necesario ganar eficiencia en la banca a través de un incremento de las fusiones, un control de los costes para mejorar la rentabilidad y una mayor transparencia.