
El consejero delegado de Airbus Group en España, Fernando Alonso, se subirá hoy al vuelo de ensayo en un A400M como el que el sábado se estrelló en Sevilla y en el que murieron cuatro personas. Es un homenaje adecuado a los fallecidos en el siniestro y, sobre todo, constituye un espaldarazo a la credibilidad del mayor programa aeronáutico de la historia de España.
Más allá de un gesto que honra a Alonso y a la compañía, todavía más importante es su anuncio sobre la creación de una comisión de investigación para aclarar los causas del accidente del avión militar. Airbus debe llegar al fondo de la tragedia y dar a conocer todos los detalles. Únicamente la completa transparencia salvará un programa que sólo en España generará 6.000 empleos.