España cruzó ayer por unas horas la frontera de la insolvencia. La prima de riesgo superó los 500 puntos básicos, más allá de los cuales el rescate parece inminente. Sucedió en Grecia, Italia y Portugal, pero no en Italia, que por dos veces rebasó el límite y se recuperó. Además, en los tres primeros casos se dio la circunstancia de que el rendimiento de la deuda a 10 años superó el 8%; en España está en el 6,30%. Otro factor de tranquilidad es que el Tesoro ya ha emitido el 53% de la deuda prevista para 2012 y tiene liquidez suficiente -casi 50.000 millones- para cubrir las necesidades del año. A corto plazo España aguanta, pero hay que poner remedio para que bajen cuanto antes los tipos de interés de la deuda y se recupere la confianza.