
El Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social ha suspendido la reunión de la mesa de diálogo social sobre empleo convocada para hoy con el objetivo de abordar los cambios que el Gobierno quiere introducir por decreto en la reforma laboral de 2012.
Según fuentes del Departamento que dirige Magdalena Valerio, la reunión, que iba a celebrarse en torno al mediodía, ha sido pospuesta, todavía sin fecha, "por motivos de agenda" de los representantes del Ministerio en la mesa.
Fuentes sindicales han expresado su "decepción" por la suspensión de este encuentro y siguen instando al Gobierno a que modifique la reforma laboral de 2012 por decreto. En su opinión, no hacerlo supondría darle a la CEOE "capacidad de veto", pues la patronal no quiere que el Ejecutivo legisle por decreto en periodo electoral.
Los sindicatos también quieren que el Gobierno apruebe por decreto cambios en el sistema de pensiones, empezando por la derogación de la reforma de 2013.
UGT dio de plazo al Gobierno hasta este martes para pronunciarse sobre su intención o no de derogar la reforma de pensiones de 2013, advirtiendo de que si su respuesta es negativa, romperá el diálogo e iniciará un proceso de movilizaciones.
CCOO, por su parte, instó ayer al Ejecutivo, por boca de su secretario general, Unai Sordo, a buscar apoyos políticos para sacar adelante los cambios en la reforma laboral de 2012, especialmente con Unidos Podemos. "Actualmente no existe ninguna línea de diálogo entre el Gobierno y Podemos para concretar los cambios en la reforma laboral", denunciaba ayer Sordo.
La ministra de Trabajo lleva días diciendo que la intención del Gobierno es hacer un decreto para aprobar estos cambios, que se centrarían en la implantación en las empresas de un registro de la jornada laboral de sus trabajadores; recuperar la 'ultraactividad' de los convenios; dar prevalencia al convenio sectorial sobre el de empresa, y modificar la regulación de las subcontratas para mejorar las condiciones laborales de los trabajadores subcontratados.
Álvarez resta importancia a la suspensión de la mesa de empleo y dice que el diálogo es "pleno y absoluto"
El secretario general de UGT, Pepe Álvarez,restaba hoy importancia a la suspensión, por parte del Gobierno, de la reunión que iba a celebrar este mediodía la mesa de diálogo social de empleo para abordar cambios en la reforma laboral de 2012.
Álvarez, que ha asistido a la intervención de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, en los Desayunos Informativos de Europa Press, ha señalado que la suspensión de la mesa se ha debido a problemas de agenda de la secretaria de Estado de Empleo, Yolanda Valdeolivas, y ha quitado hierro a esta situación asegurando que el diálogo con el Gobierno es "pleno y absoluto".
En este sentido, el dirigente sindical ha subrayado que hay contactos cada día y que éstos seguirán "hasta que sea posible desmontar" aquellos aspectos de la reforma laboral más lesivos para los trabajadores. "Hay voluntad política", ha apuntado el líder de UGT.
Sin embargo, ha añadido, ahora no se trata sólo de que el Gobierno tenga voluntad, sino de que también la tengan los grupos parlamentarios, pues los decretos que quiere sacar adelante el Ejecutivo tienen que recibir apoyos en la Diputación Permanente para asegurar su vigencia.
Y esto, según Pepe Álvarez, requiere algo de tiempo y un trabajo, el de concitar apoyos parlamentarios, en el que los sindicatos también tienen que colaborar.
"Tenemos que darnos un poco de tiempo porque hay que concitar acuerdos con una parte muy importante de los grupos, desde luego de todos los que dieron soporte a la moción de censura y, si se puede, de alguno más", ha dicho el secretario general de UGT.
En todo caso, el dirigente sindical ha afirmado que el decreto con los cambios en la reforma laboral no tiene por qué ir este viernes al Consejo de Ministros, pues aún se celebrarán otros antes después de la disolución de las Cortes (5 de marzo) y antes de las elecciones generales del 28 de abril. "Lo importante no es qué día va a estar sino que esté", ha apuntado al respecto.
Álvarez se ha mostrado "absolutamente convencido" de que la negociación con las formaciones políticas dará frutos, pues "no ve" a algunas de ellas ofreciendo como justificación que hay elecciones generales para negarse a derogar las "situaciones dramáticas" que genera la reforma laboral.