A pesar de que, finalmente, el acuerdo presupuestario entre el Gobierno y Unidos Podemos no incluyó la reclamada flexibilización de la regla de gasto de las Corporaciones Locales -aunque sí algunas medidas que amplían el marco de las inversiones financieramente sostenibles-, los municipios insisten en que una nueva regla de gasto se aplique en sus cuentas en este mismo 2018.
De hecho, la próxima semana las entidades locales comenzarán a negociar esta alternativa con el Ministerio de Hacienda en el Grupo de Trabajo 'resucitado' por ambas partes para reformar la regla de gasto, tras pactarlo con la responsable del departamento, María Jesús Montero. Así lo indicó Abel Caballero, presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias, quien recordó que este grupo ya existía, pero que Cristóbal Montoro, anterior ministro de Hacienda, decidió paralizarlo.
Caballero, también alcalde socialista en Vigo, indicó que en el encuentro, además de nuevas cifras para la regla de gasto, se plantearán y negociarán dos cuestiones: que se aplique sobre los presupuestos iniciales y no sobre los liquidados y que determinadas partidas excepcionales no computen para el techo de gasto. Caballero concretó estas excepciones en el gasto que generan determinadas catástrofes medioambientales y las indemnizaciones generadas por sentencias relacionadas con concursos públicos.
Respecto a si dará tiempo de aplicar posibles medidas acordadas en este grupo de trabajo en 2018, aseguró que: "Se pueden aplicar en tres días". Ángel Gabilondo, portavoz del PSOE en la Comunidad de Madrid, también compartió con el presidente de la FEMP la necesidad de flexibilizar la regla de gasto de las Administraciones Locales.
Más competencias
Caballero abordó estas cuestiones durante un desayuno informativo celebrado en Madrid este martes. En él reclamó una reforma de la Constitución que permita a los municipios captar competencias de los ámbitos de la sanidad, la educación y el transporte, dado los ayuntamientos ya participan en ellos pero sin capacidad de decisión, y ello a pesar de que "la demanda inmediata de estos servicios recae en los municipios".
Asociado a esto reclamó otra reforma, a su vez, de la financiación local para poder asumir estas competencias. De vuelta al techo de gasto y su regla, lamentó los pocos incentivos para su cumplimiento. "A los que no cumplen, no se les sanciona. Y a los que lo hacen, se les reprende por ello".
Por otro lado, lamentó que los Presupuestos Generales del Estado que diseña el Gobierno puedan no salir tras la negativa de los partidos soberanistas catalanas de sentarse a negociar: "Si no se aprueban, va a ser muy malo para todos el país". Así mismo, confirmó que se presentará a la reelección en las próximas elecciones para mantenerse como alcalde de Vigo.