La agencia de rating Moody's ha rebajado la calificación crediticia de Italia de Baa2 hasta Baa3, lo que la sitúa a solo un escalón del 'bono basura', aunque con perspectiva estable. El principal motivo que alegan es el incremento del déficit que el gobierno de Giuseppe Conte tiene previsto para los próximos años.
"La ratio de deuda pública de Italia probablemente se estabilice cerca del actual 130% del PIB en los próximos años, en lugar de comenzar a recortarse, como esperaba Moody's", señalan desde la agencia de calificación.
En este sentido, aunque el Ejecutivo italiano proyecta un déficit del 2,4% sobre el PIB para 2019, y del 2,1% para 2020 y 1,8% para 2021 - siempre por encima de lo exigido por la Unión Europea - , Moody's apunta que prevé que se sitúe "cerca del 2,5% del PIB en cada uno de los tres próximos años". Por eso, subrayan, creen que "las proyecciones del gobierno son optimistas" y que "las mayores tasas de interés probablemente amortiguarán el impacto positivo en la flexibilización fiscal".
"La tendencia de la deuda pública es vulnerable a las perspectivas de un crecimiento económico más débil, lo que haría que la ratio de deuda pública aumentara más de su ya elevado nivel", continúan.
Además, Moody's critica los "planes de política fiscal y económica" del gobierno de Conte, al señalar que ralentizarán el crecimiento hasta cifras del 1%, dado que "el estímulo fiscal proporcionará un impulso al crecimiento más limitado de lo que asume el gobierno".
La agencia apunta además que, pese a todo, Italia presenta algunas "importantes fortalezas crediticias que equilibran las perspectivas fiscales debilitadas", tales como "una economía muy grande y diversificada", "una posición de inversión internacional casi equilibrada" y unos hogares "con altos niveles de riqueza", entre otros.