
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau y el presidente delegado de la Junta Constructora de la Sagrada Familia, Esteve Camp, han presentado este jueves el acuerdo alcanzado para la regularización de las obras de la basílica, 136 años después del inicio de una construcción que carece de permiso oficial.
En rueda de prensa Colau y Camp han concretado a los medios los puntos del convenio que desatasca una situación tras la que el Ayuntamiento lleva casi dos años. Con este acuerdo el templo se ajustará a la normativa y pagará 36 millones de euros en diez años para ayudar a financiar los gastos municipales que conlleva su actividad. La alcaldesa lo ha definido como un "acuerdo muy positivo".
El acuerdo, en cifras
Para la regularización de los entornos:
- El templo invertirá 4 millones en reurbanizar las calles de Cerdeña, Provenza, Marina y Mallorca. En ésta última la polémica pasaba por que la disposición del plano original contaba con ese espacio para colocar una pasarela. Cumplirlo implicaría la expropiación y derribo de 150 viviendas. Sin embargo los responsables de obra no ven necesaria su instalación para concluir los trabajos. Este punto ha quedado fuera del acuerdo para tratarse más adelante con la participación de los representantes vecinales.
- Se destinarán 300.000 euros anuales durante 10 años, en función del número de visitantes, para el mantenimiento del espacio público y de los agentes cívicos, que promueven la información, sensibilización y promoción de actitudes cívicas.
En cuanto a mejoras en el transporte público:
- El templo destinará 7 millones a habilitar un acceso directo del metro a la basílica o a ampliar los existentes.
- 2,2 millones de euros al año durante 10 años, en función del número de visitantes, irán a la mejora del transporte público.
- La Sagrada Familia contribuirá con 22 millones a la financiación de la red de transporte público.
- Para controlar la afluencia de visitantes, no se podrá aumentar el actual límite de aforo hasta el 2026, fecha prevista del fin de las obras, y el acceso a la tienda se hará sólo desde el interior del templo.

Un permiso de Sant Martí a Gaudí
Las obras de la Sagrada Familia siguen adelante en base al permiso que el Ayuntamiento de Sant Martí de Provençals otorgó al arquitecto Antoni Gaudí. Fue en 1882 cuando Francesc de Paula del Villar inició la construcción, aún inconclusa en un 30%.
La junta constructora y el arquitecto director del templo, Jordi Faulí, tienen fijada la finalización de los trabajos arquitectónicos para 2026, sin embargo y de cumplirse, aún quedará trabajo por hacer: será en comisión (tres teólogos y cinco críticos de arte) donde se decida la decoración de la fachada de la Glòria.
Además, habrá que desatascar la polémica por la colocación de una pasarela sobre la calle Mallorca. Cumplir con los planos supondría la expropiación y derribo de 150 viviendas, sin embargo los responsables de obra no ven necesaria su instalación para concluir los trabajos en fachada.