
La lucha de las 'kellys' empieza a dar sus frutos. Ha sido un largo periplo pero por fin la Mesa del Empleo de Calidad en la Hostelería, presidida por la secretaria de Estado de Empleo, Yolanda Valdeolivas, ha aprobado algunas de las peticiones del colectivo que une a las camareras de piso. Han conseguido que se reconozcan como enfermedades profesionales de las camareras de piso aquellas "relacionadas con determinados movimientos repetitivos en brazos y manos propios de su trabajo".
Este colectivo lleva años reclamando el amparo del estado dado el sobreesfuerzo físico que conlleva su trabajo y la precariedad laboral del sector en el que se mueven. De media aseguran hacer hasta 400 habitaciones al mes para conseguir un salario que no supera los 800 euros en la mayoría de los casos y con contratos por horas que las condenan a tener que vivir pendientes de que las llamen e impiden la conciliación de la vida familiar cuando además la mayoría de las 'kellys' son cabeza de familias monomarentales.
Tras la reunión en el mes de abril con el gobierno de Mariano Rajoy, las 'kellys' esperan reunirse con Pedro Sánchez durante el próximo mes pero una de las reinvindicaciones principales del colectivo, ha sido aprobada y será puesta en marcha de manera inmediata. En la Mesa del Empleo de Calidad en Hosteleria, se ha acordado que la Dirección General de Ordenación de la Seguridad Social que depende del Ministerio de Trabajo emita la resolución "para que las mutuas apliquen el reconocimiento de manera inmediata". Así las camareras de piso estarán más protegidas.
En la reunión de la Mesa Sectorial han estado presentes agentes sociales y representantes de las Comunidades Autónomas que han apoyado esta resolución que se emite para que "el acuerdo se implante cuanto antes", en espera de que se modifique el Real Decreto 1299/2006, que aprueba el cuadro de enfermedades profesionales en el Sistema de Seguridad Social, ha informado el Ministerio de Trabajo en nota de prensa.
En la misma nota, el Ministerio ha asegurado que la Mesa "valorará la inclusión de una lista complementaria de enfermedades" padecidas por trabajadores del sector hotelero, especialmente las camareras de piso por la exigencia física de sus tareas que las obligan a mantener posturas poco saludables y repetitivas. Se pondrá especial atención sobre lesiones y dolencias " sobre las que se sospecha un origen profesional, como las dorso-lumbares, cervicales, hernias y otros".
Mayor formación en prevención de riesgos y salud laboral
El reconocimiento de enfermedades profesionales es una demanda histórica de las camareras de piso que ven como las dolencias clásicas de su labor les condenaba a tener que dejar de trabajar de manera anticipada porque su salud les impedía seguir haciendo las tareas propias de su puesto. Esta 'jubilación anticipada' no siempre es factible, al encadenar contratos precarios por es casi imposible alcanzar los años de cotización legales mínimos para tener derecho a una pensión y muchas deben seguir trabajando pese a dolores, lesiones y enfermedades.
En cuanto a la formación laboral, se ha acordado constituir un Grupo de Trabajo que analice y proponga medidas dirigidas a la "cualificación y recualificación profesional" de los trabajadores del sector y su "formación en materia preventiva" lo que se prevé ayude a limitar las accidentes laborales del sector.
En materia de prevención de riesgos laborales, "se ha planteado la necesidad de elaborar una guía práctica para evaluar los riesgos laborales" en el sector de la hostelería. Un sector de trabajadores que deben tener una especial protección "a riesgos ergonómicos y psicosociales (cargas físicas y mentales)".
Con este reconocimiento de las enfermedades profesionales, no termina la lucha de las 'kellys' que ya en abril presentó al entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, contratos fraudulentos y puso en conocimiento la precariedad laboral que sufre el colectivo de las camareras de piso. Detalles que, según Ángela Múñoz-una de las portavoces de las 'kellys'- el expresidente "desconocía" pero les " consta que la preocupación de Rajoy era real".
Mientras tanto, la lucha de Las 'kellys' no termina y han continuado con sus movilizaciones durante todo el verano. La lucha no terminará hasta que la precariedad y la sobreexplotación acaben, según Ángela Muñoz estos son los verdaderos problemas de las camareras de piso.