
El 77,7% de los trabajadores asegura que logra evadirse del trabajo durante sus vacaciones, mientras que el 22,2% asegura no hacerlo. Aumentado 10 puntos porcentuales en comparación con el año anterior. Según un estudio realizado por Randstad para conocer si los ocupados desconectan del trabajo durante las vacaciones o no.
Aparte de analizar la desconexión del trabajo, también ha estudiado cuáles son las razones por las que el trabajador no logra desconectar y cuánto tiempo necesita para hacerlo, teniendo en cuenta la edad y el cargo que obstenta el empleado en la compañía.
Si nos fijamos en la edad profesional, el estudio revela que a menor edad, mayor es la dificultad para desvincularse de los temas laborales. Los menores de 25 años son los que muestran mayor porcentaje de ocupados que no consiguen desconectar, con un 30,8%, mientras que los mayores de 45 años son los que les cuesta menos evadirse con un 15,4%.
Las razones por las que los ocupados no consiguen desconectar durante el periodo vacacional son diversas, una de las más extendidas es la dificultad para poder desvincularse de temas laborales. Un 49,5 % de los trabajadores asegura que esta es la causa por la que no desconecta. Le siguen la comunicación con la empresa, iniciada por la compañía (25%), que no haya otra persona que se ocupe de las funciones (14,7%), delegar en otro compañero (6,8%) y el contacto por parte del propio trabajador con la empresa (4,1%).
El porcentaje de ocupados que afirma que no mantiene ningún contacto con la empresa durante el periodo vacacional es superior al 70%, al igual que la cifra de ocupados que logra evadirse del trabajo. En concreto, el 73,4% afirma que no se comunica de ninguna manera con su compañía.
El tiempo medio que el profesional tarda en desconectar es menor de tres días. En concreto, el 28,4% asegura lograrlo en ese periodo de tiempo, siendo el grupo que mayor tasa alcanza, seguido de aquellos que lo hacen en menos de un día (25,6%).
Por tramos de edad, los profesionales que tienen menos de 25 años son los que necesitan un periodo más largo para desconectar del trabajo, entre una o dos semanas para conseguirlo. Por el contrario los mayores de 45 años, el 31,2% aseguran que tardan menos de un día en desconectar.
Los técnicos son los que menos tardan en desconectar, mientras que los directivos son los que más. A mayor responsabilidad, mayores son las dificultades para desconectar en vacaciones.