"Europa es nuestra casa". Giuseppe Conte, obtuvo ayer la confianza del Senado de Roma con un discurso que matizó las posiciones eurófobas de la coalición (M5E y Liga) que le apoya, pero sin dejar de reivindicar la naturaleza "antisistema" del nuevo Ejecutivo.
Delante de la Cámara Alta transalpina el nuevo primer ministro enumeró durante más de una hora todos los ambiciosos objetivos de su "Gobierno del cambio" con la vista puesta a dar certidumbre a los aliados europeos. Conte explicó que el objetivo del nuevo Ejecutivo italiano será "reivindicar una Europa más fuerte y más justa", apostando por una "adaptación en la gobernanza de la Unión". Él y sus ministros llevarán estos temas a la agenda europea, confiando en su capacidad de negociación. "Los intereses de Italia en esta fase de reconstrucción europea coinciden con los intereses de Europa" y el objetivo de evitar su declive.
Sin embargo, el primer ministro indicó también que "el primer banco de pruebas del diálogo con Europa será la inmigración" insistiendo en que "la gestión de los flujos ha sido un fracaso". Conte intentó matizar las polémicas palabras de Matteo Salvini, el líder de la derechista Liga y vicepresidente de Gobierno, con la cartera de Interior, que el domingo, a las pocas horas de tomar el cargó, anunció: "Se acabó la fiesta para los inmigrantes. Qué empiecen a hacer las maletas". Salvini además acusó a Túnez de "exportar convictos", causando una protesta formal del Gobierno del país.
Conte sin embargo recordó ayer al sindicalista maliense Sacko Soumayla asesinado a tiros el pasado fin de semana en la localidad de Calabria y declaró que en Italia "no somos ni nunca seremos racistas" indicando que las medidas para parar la llegada de inmigrantes indocumentados "acabarán con el negocio de la falsa solidaridad". En su discurso moderado y tranquilizador el nuevo primer ministro italiano reivindicó además su condición de "populista". "Si populismo es la actitud a escuchar las necesidades de la gente, comparto las reflexiones de Dostoyevski recogidas por Puskin: si ser antisistema significa introducir un nuevo sistema, lo reivindicamos", añadió.
Apoyo del Parlamento
Adicionalmente, el primer ministro abonó el terreno para la votación que tendrá lugar en el Parlamento italiano, y de cuya Cámara también precisa el apoyo.
La votación en la Cámara Baja está convocada para el día de hoy. Pero la coalición de Gobierno, integrada por el M5E y la Liga, cuenta con una mayoría en el Senado con un margen de diez votos y con una mayoría más amplia en la Cámara de Diputados, por lo que se espera que el trámite parlamentario transcurra con normalidad. Una vez superadas las votaciones en las dos Cámaras, Conte abandonará el país para participar en su primera cita internacional, la cumbre del G-7 que se celebrará en la ciudad canadiense de Charlevoix desde el viernes.