MADRID, 9 (EUROPA PRESS)
El secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, aseguró hoy que los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2009 son los adecuados para hacer frente a la "difícil" situación que atraviesa la economía española, y aseguró que el crecimiento negativo de dos décimas del PIB registrado por la economía española en el tercer trimestre "no es un dato dramático", por lo que instó a "no regodearse en la crisis".
En declaraciones a los periodistas tras su comparecencia ante la Comisión de Economía y Hacienda del Congreso de los Diputados, Ocaña explicó que "decida lo que decida el Senado", confía en la validez de las cuentas públicas, cuyos vetos debate hoy la Cámara Alta, si bien coincidió con la afirmación del vicepresidente económico, Pedro Solbes, de que las previsiones macroeconómicas del Gobierno están "desactualizadas".
"No son las estimaciones de superávit o déficit que haríamos ahora", señaló Ocaña, quien minutos antes había defendido la "respuesta sensata" que el Ejecutivo está ofreciendo a una situación "extraordinaria" a nivel global, recordando que las posibilidades del Estado "no son infinitas" y obligan a una "labor de encaje" para establecer las prioridades de gasto.
REVISION DE LAS PREVISIONES ESTE MES.
Asimismo, reiteró que las previsiones del Gobierno "pueden variar con cada noticia negativa" porque tienen un carácter normativo, por lo que instó a esperar a la revisión de diciembre, si bien adelantó que el déficit "estará en el entorno del 3%" e incluso se podría ver "revisado a la baja". En este sentido, señaló que se remitirá a Bruselas, junto a esta revisión de las estimaciones, un plan de estabilidad y reequilibrio para el crecimiento económico.
Por su parte, el portavoz del PP en la Comisión, Alvaro Nadal, le echó en cara que la "caída de recaudación es casi tan grave como la del empleo", y que ambas cifras son un "tema serio" porque reflejan una situación "muy dura" que obligan al Gobierno a liderar el "proceso de ajuste" de la economía española.
PREOCUPACION POR LA DEUDA.
En este sentido, advirtió del riesgo para la sostenibilidad de la deuda pública española que suponen las nuevas medidas aprobadas por el Gobierno, desde el paquetes de actuaciones en apoyo a la banca a los nuevos fondos de inversión pública para los ayuntamientos y sectores productivos.
En este sentido, Ocaña admitió que el Ejecutivo "se tiene que preocupar y mucho" por la situación de la deuda, pero garantizó que la misma no supone "un problema a corto plazo" porque estas medidas no tienen "carácter estructural" y su alcance se limita a 2009.