Los sindicatos pedirán igualdad, pensiones dignas y la derogación de la reforma laboral

Madrid, 25 abr (EFE).- Los sindicatos CCOO y UGT saldrán el 1 de mayo a la calle en Madrid para reivindicar la igualdad laboral y salarial mujer-hombre ya manifestada el 8 de marzo pasado, las pensiones dignas, la derogación de la reforma laboral de 2013 y la recuperación del poder adquisitivo del salario y de las pensiones.

Además, tal como han explicado los secretarios generales de CCOO Madrid, Jaime Cedrún, y de UGT de Madrid, Luis Miguel López Reillo, los trabajadores de todas las capitales y regiones europeas se manifestarán el 1 de mayo contra "la pérdida de capacidad adquisitiva de los salarios", tal como acordaron los sindicatos europeos en un encuentro celebrado en Malta.

Con el lema "Tiempo de Ganar", los sindicatos van a reclamar en las calles, en una manifestación entre la Plaza de Neptuno y la Puerta del Sol, al mediodía del 1 de mayo, "igualdad, mejor empleo, mayores salarios o pensiones dignas".

Así lo han explicado Cedrún y López Reillo en una rueda de prensa en la que ambos han reiterado que la gran manifestación de mujeres del 8 de marzo pasado "no puede quedar así", pues -como ha dicho el líder de CCOO- "no estamos viendo las consecuencias de aquella movilización".

Según Cedrún, la marcha de los trabajadores del 1 de mayo reivindicará también, como todos los años, el empleo como "objetivo clave" teniendo en cuenta que en Madrid hay en la actualidad 250.000 trabajadores menos que en 2007, o la inversión en empleo público y privado.

López Reillo, por su parte, ha hecho hincapié en que el día mundial del trabajo debe ser reivindicado el fin de la brecha salarial de género, "que la mujer cobre lo mismo que el hombre por el mismo trabajo".

"La mujer, desde que naces hasta que muere, siempre está perdiendo", ha dicho el líder de UGT, y ha agregado que esto ha sucedido durante la crisis económica y antes, a lo largo de la vida, teniendo en cuenta que las mujeres -ha dicho- cobran "menos salario y menos pensión" y tienen más trabajo doméstico.

López Reillo también ha criticado el hecho de que a pesar del crecimiento económico del que presume el Gobierno de España "el cambio en la riqueza no llega a los trabajadores, que tienen salarios iguales a los que había hace ocho o nueve años; el beneficio se queda en las grandes fortunas".

Además, el dirigente de UGT ha dicho que la reforma laboral es "lo más grave que ha sucedido en los últimos años" y que el asunto de las pensiones, que el Gobierno considera "dignas", "está logrando cabrear a los pensionistas, a quienes han levantado España".

En la misma rueda de prensa, Cedrún y López Reillo han comentado los resultados del informe conjunto "La Siniestralidad Laboral en la Comunidad de Madrid en 2017", que refleja como la accidentalidad mortal se redujo el año pasado respecto de 2016, aunque ha aumentado la cifra de accidentes de trabajo graves y leves.

Según el Informe, en 2017 fueron notificados 89.096 accidentes de trabajo con baja de los cuales 72.856 fueron "en jornada laboral" y 16.240 'in itínere' (yendo de casa al trabajo o volviendo de él).

Con respecto a 2016, el aumento del número de accidentes fue "generalizado" y se incrementaron los accidentes totales (2,2 %), los sucedidos en jornada de trabajo (2,4 %) y los 'in itínere' (1,1 %).

Los sindicatos han destacado a este respecto que los accidentes en el trayecto al trabajo o hacia el domicilio han aumentado especialmente "entre mujeres", algo que, en su opinión, obedece a "la precariedad" y al hecho de que este fenómeno obliga a las mujeres a mayores desplazamientos.

Si de cada diez de estos accidentes seis afectan a mujeres la deducción es, dicen los sindicatos, que "las peores condiciones laborales de los empleos femeninos se manifiestan en mayor accidentabilidad".

Tanto CCOO como UGT han reiterado la petición a los empresarios para que "garanticen el cumplimiento de la ley de medidas de prevención de los riesgos laborales.

Según López Reillo, esta siniestralidad ha aumentado desde la reforma laboral, a partir de la cual hay "contratos de menos de una semana de duración, trabajos con mayor dificultad y peligrosos", y también ha dicho que muchos accidentes podían haber sido evitados "con medidas de seguridad no costosas".

Y también han instado la potenciación de las inspecciones de trabajo teniendo en cuenta, han dicho, que "en España hay una tercera parte de los inspectores que hay en otros países, aplicando los ratios de la Unión Europea".