A toda prisa a pedir la jubilación. Ése podría ser el resumen de lo que ha sucedido en los dos primeros meses del año 2018 en los que más de 63.000 trabajadores han solicitado poner fin a su vida laboral en activo y solicitar una pensión de jubilación. Según los datos del Ministerio de Empleo, es la segunda cifra más alta registrada en los dos primeros meses del año, ya que sólo las 65.425 solicitudes del inicio de 2012 superaron la cifra.
Entonces huían de la reforma de pensiones del PSOE, que elevaba la edad de jubilación y el periodo de cómputo a partir de 2013, y ahora lo hacen de la del PP, que introducirá el llamado factor de sostenibilidad a partir del 1 de enero de 2019.
Dado que este factor rebajará la pensión inicial, parece haberse desatado una importante huida de sus efectos, que ha llevado a muchos trabajadores a retirarse antes de lo que tenían previsto. Una huida que podría acentuarse en el tramo final del año, en el que se podría alcanzar un nuevo récord histórico de altas de jubilación.
De todos los solicitantes, 27.950, más de un 44% del total, ha pedido su retiro, a pesar de no haber cumplido los 65 años, cuando la edad legal de jubilación ha subido este año a 65 años y medio. El grueso, 29.500 personas, lo ha hecho a los 65 años. De esta forma, la edad media de jubilación de estos dos primeros meses del año continúa alejada de la legal, ya que es de 64,2 años, más de un año antes de lo que establece la edad legal de retiro este año.
Cobran una pensión un 22% superior a la media
Según los datos de la Seguridad Social, la pensión media de los que solicitaron la baja en febrero es de 1.316 euros, lo que significa que su pensión inicial es un 22% superior a la media de jubilados. Si sólo se tiene en cuenta a los que se retiran como cotizantes del régimen general, la diferencia es mayor: su pensión inicial es de 1.436 euros, un 33% más que la media de retirados.
Al cierre de marzo, el número de jubilados, según los datos del Ministerio de Empleo, era de 5,89 millones, lo que significa que es más que probable que este año se alcance la cifra de 6 millones de jubilados, sobre todo, si se mantiene el altísimo ritmo de altas de los dos primeros meses del ejercicio. En lo que va de año, el incremento en el número de retirados ronda el 1,75%, lo que muestra una ligera aceleración respecto al inicio del año pasado, cuando estaba ligeramente por encima del 1,6%.
La nómina mensual supera los 6.324 millones de euros y crece a un ritmo anual del 3,74%, que se incrementará si se aprueban los presupuestos del Estado, que incluyen subidas de las pensiones mínimas, lo que redundará en un incremento del gasto en pensiones de jubilación.