El sector de los seguros de crédito se encuentra en un momento de expansión en España gracias a la coyuntura económica que atraviesa el país. La recuperación de la economía española, caracterizada en los últimos años por un fuerte componente de exportación de las empresas, ha favorecido el reflotamiento de un mercado castigado en los años más crudos de la crisis por la epidemia de impagos. En este sentido, el Observatorio elEconomista-Cesce -celebrado en la sede del periódico, en Madrid- arroja luz sobre la situación del negocio y los retos que afrontan las aseguradoras en su apoyo a las empresas españolas para su nueva aventura internacional.
Sobre esta labor de soporte a la empresa, el recientemente nombrado presidente de Cesce, Álvaro Rengifo, recuerda que la compañía ya es "referente en ayudar a manejar los riesgos". Además, Rengifo explica que en los últimos años la compañía ha evolucionado al fijar su actividad sobre los deudores de las empresas que demandan esta gestión de riesgos y, como consecuencia, "se ha desarrollado un servicio integral" en el proceso de internacionalización.
No obstante, éste no es el único frente desde el cual Cesce se ha convertido en la principal herramienta de apoyo a la globalización comercial de las empresas españolas. Como argumenta el economista e investigador de la Universidad de Essex, Javier Santacruz, Cesce también ha tenido un papel central en la expansión internacional de las empresas españolas a través de la inversión. "El hecho de que la posición inversora de España crezca de forma considerable en países fuera de la zona euro" es producto del papel fundamental de estas compañías aseguradoras, "como ocurre en el sector de las infraestructuras", principalmente, según Santacruz.
Este afianzamiento de la posición inversora también es puesto en valor por el propio presidente de Cesce, quien además recuerda que en los últimos 15 años España ha pasado de contar con 50.000 empresas exportadoras a 150.000. Y además, como añade Rengifo, "la mayoría de ellas lleva cuatro años exportando de manera estable", lo que ha permitido revertir la llamada enfermedad de la tijera, según la cual, cuando el mercado interior iba mal se salvaban los muebles vendiendo en el exterior, pero cuando mejoraba el mercado interno se descuidaba el comercio con otros países.
De hecho, en el campo de la inversión, la compañía de seguros de crédito a la exportación ha articulado nuevos productos para mantener el incremento de presencia en el exterior. Por ello, Cesce ha incorporado una ayuda económica a la empresa exportadora, principalmente para la mediana y pequeña, llamada factoring. Este producto funciona como un crédito no bancario, "por lo que no acaba apareciendo en los registros de banca y podemos expedirlo a un interés del 2 por ciento y en muy poco tiempo", explica el presidente de la aseguradora mientras confirma que ello es debido a la agilidad que le da "manejar una gran cantidad de información" y por el alto grado de evaluación de los riesgos.
En este sentido, otro de los baluartes de la compañía es la potencia que adquiere por el hecho de ser la empresa que gestiona los riesgos-país del Estado español, políticos y comerciales, que afectan a las operaciones de comercio e inversión en el exterior.
Herramienta empresarial
Desde el otro lado del sector, el de las empresas que contratan los servicios integrales de gestión de riesgos, los clientes de Cesce reconocen la tranquilidad que aporta contar con un apoyo en el mercado extranjero, principalmente en los destinos más volátiles desde el punto de vista comercial y político.
Éste es el caso de Acesur, una empresa española referente a nivel mundial en el sector del aceite de oliva, que actualmente vende fuera de nuestro país cerca del 50 por ciento de su producción. Su director de negocio internacional, Sergio Antón, señala sobre este aspecto que para vender bien es necesario hacerlo con margen y asegurándose de que se cobrará, y en ese punto es donde Cesce aparece como un aliado en la exportación del producto.
"Primero nos ayuda en el análisis de los clientes a los que vamos a vender y, en segundo lugar, cuando hemos recibido el informe de Cesce con el tipo de cliente y el riesgo que tiene, decidimos si venderle o no", señala Antón.
Todo ello, con el objetivo de que el negocio funcione con el menor número de operaciones fallidas. "Al final de año, el número de impagos en nuestra empresa es mínimo, vendiendo en exportaciones cerca de 200 millones de euros", recalca el director de negocio internacional de Acesur.
Así, Antón explica que el cambio de modelo internacional de Acesur, que pasa de vender mercancía al exterior a localizarse en los mercados destino con plantas de producción y puntos de comercialización, supone un incremento del riesgo para la empresa. "Casi el 30 por ciento de las ventas en exportación se hace desde el exterior, por eso es muy importante tener a Cesce detrás", asegura.
Más allá, esta información pensada principalmente para ayudar a la empresa en la decisión de vender o no un producto, trasciende también al dónde realizar o no estas operaciones. Así, un aspecto que preocupa de forma general a los empresarios exportadores es saber acerca de la viabilidad de comerciar en nuevos mercados, y también Cesce ha atendido esta arista del comercio internacional. Así, como recuerda el presidente de la compañía aseguradora, el cliente puede hacer uso de todos los elementos que el Estado pone a su disposición. A la hora de decidir un nuevo destino de ventas "primero puedes ayudarte de las oficinas comerciales y del Instituto Español de Comercio Exterior (Icex) en España", aunque una vez decidido el país "es más difícil comprobar el riesgo político" que existe, pero sí ofrecer una visión sobre el tipo de clientes afincados.
Rapidez en la información
En este proceso de soporte, la fluidez de la información sobre los deudores de las empresas se convierte en uno de los principales retos de la compañía aseguradora y una de las principales demandas de los clientes.
En este sentido, José Navarro, el presidente y fundador de Gioseppo, empresa española perteneciente al sector del calzado y que tiene presencia en más de 60 países, asegura que en el proceso de internacionalización de su compañía es fundamental la información, "ya que nos permite sentarnos con el pequeño cliente y darles facilidad de pago". En este punto, Navarro, igual que en el caso de Acesur, asegura que el ratio de impagados con Cesce "es muy bajo".
No obstante, el presidente de Gioseppo esgrime un campo donde el servicio de cobertura de riesgo podría mejorar: la rapidez de la información. "La información a veces no entra tan rápido como nos gustaría, y desearíamos saber por qué", señala. Concretamente, el presidente de la empresa se refiere al sistema de asignación de créditos.
"Cesce tiene un código de referencia donde dice si el comprador devuelve facturas. Si las devuelve, en ese caso no hay crédito, pero a veces ocurre que no se activa el crédito porque falta información por enviar". En estos casos, como explica Navarro, su compañía, en disposición de información del comprador gracias a Cesce, trata de mediar para que esta situación se normalice, por lo que "no puede llegar muy tarde la información del sí o del no".
Sobre este elemento, el presidente de Cesce asegura que la compañía trabajará para mejorar la velocidad con la que fluyen las informaciones. "Estamos trabajando en una plataforma digital en la que tú puedas acceder a la información directamente, más rápidamente, y que con ella el cliente decida si llamar para ahondar en la información o tome ya una decisión", recalca Álvaro Rengifo.
También el profesor del CEF, profesor de Banca y Finanzas, experto en Comercio Exterior y periodista, Juan Fernando Robles, advierte de la importancia de la rapidez en el proceso de asegurar los deudores de los clientes. "Es un sector en el que la innovación va a jugar un papel fundamental porque la inmediatez de la información tiene que beneficiarse de las nuevas tecnologías". En este sentido, aunque el profesor augura "un momento dulce para el sector", señala su alta complejidad como uno de los retos que afronta, ya que "tiene que satisfacer las necesidades de clientes que facturan 1.000 euros y de los que facturan cientos de miles".
Retos del futuro
Cabe recordar que el mercado de los seguros de crédito está altamente condicionado por la evolución de la macroeconomía, precisamente uno de los retos que afronta el sector. En este sentido, el profesor Santacruz se refiere a la elevada deuda de los países, el proteccionismo comercial y las barreras comerciales, y la volatilidad de los tipos de cambio como posibles contingencias futuras.
Consciente de estos retos se muestra el presidente de Cesce, quien augura un horizonte con la digitalización como objetivo principal de la compañía. "Queremos conseguir una plataforma y un instrumento que sea útil", señala Álvaro Rengifo al tiempo que afirma haber iniciado un plan de reorganización interna para adaptarse al nuevo modelo "estando atentos a la estructura de costes y de precios" para que sea competitiva.