
El director del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), Klaus Regling, considera que Grecia precisará menos ayudas que lo inicialmente calculado en el tercer programa de rescate, a pesar de la compleja situación financiera del país.
"Hemos superado ya la mitad del periodo de tres años previsto para el programa y hasta ahora hemos pagado cerca de 32.000 millones de euros", afirma Regling, en declaraciones al popular diario Bild en su edición de mañana, lunes.
Hasta el final del programa, en agosto de 2018, se necesitarán "claramente menos créditos" de lo que inicialmente de calculó como un tope máximo, establecido en 86.000 millones de euros, prosigue el director del MEDE.
Regling argumenta que las necesidades de capitalización de los bancos griegos son menores de lo estimado y que la situación presupuestaria de Grecia ha evolucionado mejor de lo previsto.
Estas declaraciones preceden a la reunión que mantendrán mañana los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona, el Eurogrupo, para abordar la situación en Grecia.
Atenas y sus socios internacionales llegan a la reunión sin haber logrado un consenso para que los técnicos de la llamada cuádriga -Comisión Europea, Banco Central Europeo (BCE), el MEDE y el Fondo Monetario Internacional (FMI)- vuelvan al país para evaluar si Grecia ha cumplido las condiciones asociadas a su tercer rescate.
Los ministros se limitarán a evaluar la situación, ya que sin una misión en Atenas que haya conseguido un acuerdo técnico sobre el cumplimiento, se hace imposible un consenso político que permita cerrar una revisión.
En la eurozona insisten en que no hay urgencia para alcanzar un acuerdo porque Grecia cuenta con liquidez en este momento, pero el país afronta el próximo julio pagos por un total de 6.257 millones de euros en vencimientos de deuda.