Era un reclamo histórico de los Estados Federados más ricos, como Baviera. La reforma de la financiación y competencias de los Länder entrará en vigor a partir de 2020, momento en el que expira el actual contrato de cooperación entre territorios. Consistirá en el alivio de cargas impositivas a los Estados Federados, que pasarán a ser asumidas por el Estado central. Esto supondrá un desembolso de 9.700 millones de euros anuales por parte del ejecutivo de Angela Merkel.
Alemania se divide territorialmente en 16 Estados federales (Länder) desde la reunificación de 1990, que tienen transferidas constitucionalmente todas sus atribuciones legislativas, salvo que estas afecten al conjunto del Estado Federal. A diferencia de las comunidades autónomas en España, todos los Länder poseen las mismas competencias, a pesar de que hay tres que son geopolíticamente ciudades-estado (Berlín, Bremen y Hamburgo).
Las diferencias económicas entre los Estados federados del Este (los pertenecientes a la antigua RDA) y los del Oeste (República federal) son notorias, pues los primeros están históricamente menos desarrollados, tanto industrialmente como en materia de hacienda. Su paro también es más elevado, por lo que normalmente en las decisiones gubernamentales se encaminan a hacer que se iguale el crecimiento al mismo nivel que la parte occidental.
Este año, el Ejecutivo alemán aprobó la mayor subida de las pensiones en 23 años. Mientras que en el oeste el incremento será de un 4,25%, el este se beneficiará en un 5,95% de esta revalorización. La zona oriental del país recibe también desde la reunificación apoyo financiero por parte de los Estados más ricos del oeste para apoyar su reconstrucción.
Uno de los mayores ejemplos de este apoyo es el impuesto de solidaridad, por el que todos los ciudadanos contribuyen con un 5,5% de sus ingresos brutos, que luego son destinados a un reparto entre los territorios de forma participativa. Con esta reforma quedará abolido.
Contribuir o depender
Hay ciertos Estados que son netamente contribuyentes, como Baviera y otros que son económicamente más dependientes, como Berlín, por eso los gobiernos de los primeros llevan tiempo solicitando al Gobierno central un alivio impositivo. Es uno de los reclamos principales de Horst Seehofer, el líder de CSU, la coalición bávara del partido de Merkel y partícipe de la Gran Coalición. Este asunto fue llevado al Tribunal Constitucional por parte de este Land, junto con el de Hesse, otro motor económico.
Las finanzas de los Länder más pobres son deficitarias, ya que su PIB solo es el 71% del de las regiones más adineradas y sus gastos sociales son superiores en un 20%. Esta reforma lleva adosada, asimismo, una inevitable reforma constitucional, ya que este reparto financiero forma parte de la propia carta magna alemana. En declaraciones del ministro de finanzas, Wolfgang Schäuble, "servirá para establecer una base financiera para el futuro de nuestro federalismo y también una medida de alivio para los Länder. Supone una mejora de las relaciones federales-estatales".
Se eliminará el aumento igualitario del IVA y entre las nuevas responsabilidades del Gobierno estatal se incluyen las competencias en materia de transporte municipal, ayudas financieras a puertos fluviales, subvenciones para el saneamiento de las infraestructuras de Bremen y el Sarre y subsidios especiales a los Estados Federales del este.
A partir de 2020 el límite de deuda de cada Land también se regirá por las exigencias de las normas de la UE y se revisará a través del Consejo de Estabilidad. Aumentará también en 3,5 millones el fondo de Promoción e Inversión municipal para los municipios con carencias en materias de infraestructura o saneamientos. Del mismo modo, se unifican servicios administrativos para que, en un periodo de cinco años, puedan realizarse trámites burocráticos a través de Internet sobre cualquier Estado Federado, es decir, el desarrollo de la administración electrónica común.