
Después del cauteloso avance de un segundo trimestre marcado por la incertidumbre política en torno a la celebración de unas segundas elecciones, la sombra de unos terceros comicios se aleja y, con ella, la bruma que amenazaba al tejido empresarial español. Así lo refleja el Ecobarómetro del tercer trimestre, que muestra un repunte de la media nacional cercano a los 0,75 puntos, frente a los 0,25 registrados entre los meses de abril y junio.
Tras el 26J, el inicio de las negociaciones entre las distintas formaciones políticas, el acercamiento cada vez más sólido entre PP y Ciudadanos, la división en el seno del Partido Socialista y la práctica desaparición de Podemos del mapa político. Pero también, las vacaciones de verano. Y, junto a la temporada estival, el habitual tirón del sector turístico mediterráneo coloca en cabeza de la mejoría del tejido empresarial autonómico en el tercer trimestre a Cataluña, Baleares y la Comunidad Valenciana, que presentan las mayores variaciones intertrimestrales.
Pero el impulso del área mediterránea no se limita a estas tres regiones. También el sector empresarial murciano es de los que más mejoran de julio a septiembre, a pesar de mantenerse entre los últimos puestos de la clasificación. Por detrás, en términos de incremento interanual, Navarra y Aragón, que recibe la influencia del levante.
La evolución de la contratación, la creación de empresas y, con mayor peso, la capacidad de pago, integran este índice, que acumula más de tres años de vigoroso avance, poniendo de manifiesto la fortaleza de la coyuntura empresarial española en un momento especialmente delicado para nuestra economía.
Precisamente, el riesgo de impago se redujo en todas las autonomías entre el 1 de julio y el 30 de septiembre, con Navarra, Melilla y Cataluña en el podio regional.
Aunque, frente a la mejora generalizada en el conjunto de las regiones españolas en lo que a capacidad de pago se refiere, Melilla es la única que presenta más probabilidad de retraso en los abonos respecto al segundo trimestre. Aún así, la solvencia de las empresas melillenses aúpan a la ciudad autónoma al segundo puesto del ranking.
Vigorosos avances por abajo
El termómetro del entramado empresarial español que elaboran elEconomista e Informa D&B revela que ciertas áreas, como Castilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana o Murcia, registran vigorosas variaciones intertrimestrales, a pesar de situarse a la cola del listado.
Por arriba, repiten en el tercer trimestre Navarra, Melilla y Cataluña, aunque en distinto orden: Melilla cae al segundo puesto respecto a su posición entre abril y junio.
Con todo, siete comunidades y las dos ciudades autónomas se sitúan por encima de la media nacional, frente a diez regiones calificadas por debajo de los 47,69 puntos.