Ahora que el Reino Unido se prepara para salir de la Unión Europea, se especula sobre cuál será la relación entre el bloque europeo y las islas. Una buena opción sería la entrada del Reino Unido en la European Free Trade Association (Asociación Europea de Libre Comercio), sin embargo esta opción, que parece la más beneficiosa para la UE y el Reino Unido, no cuenta con el beneplácito de Noruega, tampoco con el apoyo de los defensores más radicales del Brexit.
Los países que pertenecen a la European Free Trade Association (Islandia, Noruega, Liechtenstein y Suiza) están dentro del Espacio Económico Europeo (EEE), salvo Suiza que tiene un acuerdo bilateral con la UE, lo que les da derecho a comerciar libremente con los países de la UE, pero también están obligados a ser miembros de Schengen, es decir, permitir la circulación libre de personas dentro de este área. Esta última cuestión es una de las que ha motivado que 'Sí' al Brexit, por lo que parece complejo que el Reino Unido quiera formar parte del EEE.
Noruega quiere mantener su posición
Monica Maeland, ministra de Industria de Noruega, explica a Bloomberg que "son los británicos los que tienen que aclarar su posición en este momento... Además, la UE tiene que decidir cómo quiere que sea esa nueva relación, a partir de ahí nosotros decidiremos nuestra posición. Es demasiado rápido para hablar sobre una expansión de la European Free Trade Association (EFTA)".
Aunque pertenecer a la EFTA es una vía sencilla para tener acceso libre al comercio con la UE, esta no se encuentra exenta de costes. Por ejemplo, Noruega ha tenido que adoptar el 75% de las leyes que se aprueban en la UE, aunque no ha tenido voz ni voto para negociarlas. Además, la EFTA paga 860 millones de euros al año por tener ese privilegio de comerciar con libertad con la UE sin formar parte de ella.
Si el Reino Unido quiere adherirse a la EFTA esto puede suponer un cambio radical de esta asociación. Y es que el Reino Unido sextuplica la población de todos los países que forman parte de la misma en la actualidad.
Ante esta situación, Jonas Gahr Stoere, líder del partido laborista noruego, cree que lo mejor es que el Reino Unido fabrique su propia vía para tener acceso al mercado común de la UE. Noruega debe garantizar y asegurar la estabilidad de la EFTA. "Hay pocas posibilidades de que lleguemos a un acuerdo para cambiar algo que lleva funcionando más de 20 años", explicó el político noruego.
Aún así, Maeland cree que importante llegar a acuerdos amistosos: "Gran Bretaña es un socio comercial importante de Noruega y de la EFTA, es importante que mantengamos unas buenas relaciones con los británicos". Aún así, la mejor opción para los noruegos es que el Reino Unido firme un acuerdo bilateral con la UE que no modifique las directrices de la EFTA.