
El Gobierno de la Comunidad de Madrid, bajo la presidencia de Esperanza Aguirre, y el Ministerio de Sanidad, durante la etapa de Ana Mato, se han convertido en los últimos años en dos de las principales fuentes de financiación de Ausbanc, cuyo presidente, Luis Pineda, está ahora detenido en prisión por presunta extorsión y estafa procesal.
Desde que a partir de 2009 estalló el caso Gürtel y pocos años después, en 2013, el de los papeles de Bárcenas, Aguirre y Mato han subvencionado a la organización de consumidores con un total de 638.026 euros. Ausbanc no está personado en ninguno de los dos casos, pero el sindicato de funcionarios Manos Limpias, con el que actuaba de forma concertada, sí que actúa como acusación particular en el de la caja B del partido.
Subvenciones continuas
Las cantidades aportadas son además mucho más abultadas si nos remitimos un poco más atrás, a 2003 tras la llegada de Aguirre a la presidencia de la Comunidad de Madrid. Desde entonces, Ausbanc ha recibido ayudas por un total de 962.300 euros. En concreto, Pineda ha cobrado entre 2004 y 2012 un total de 741.750 euros del Ejecutivo madrileño, fundamentalmente de la Consejería de Economía y Hacienda; y otros 220.550 euros más entre 2012 y 2013 del Ministerio de Sanidad, con Ana Mato al frente y a través de la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan). Lo llamativo en este último caso es que en 2005 fue expulsada por el Gobierno de Zapatero del registro de asociaciones de consumidores, con lo que quedó inhabilitada para seguir recibiendo ayudas.
Y no fue hasta la llegada de Ana Mato al ministerio cuando se le volvieron a dar ayudas, justo además hasta que ella presentó su dimisión por su relación con el caso Gürtel, porque a partir de 2014 Ausbanc volvió a ser expulsada una vez más. En concreto, Mato concedió una subvención a Ausbanc en 2012 por 112.350 euros y otra más en 2013 por 108.200 euros.
En su último auto, Santiago Pedraz, el juez de la Audiencia Nacional que está instruyendo el caso, no menciona ningún tipo de relación entre los pagos de Aguirre y Mato a Ausbanc, pero, según apunta, "a la espera del análisis de toda la documentación" y a la vista de lo hasta ahora actuado si "se infiere que Ausbanc no podría acceder a la concesión de dichas subvenciones, puesto que no cumpliría con alguno o algunos de los requisitos".
Así, por ejemplo, hay casos en los que no se llega al número de asociados, otros en los que directamente se inventan la figura del "asociado adherido" y otros muchos en los que se reciben subvenciones a través de entidades mercantiles destinadas, en realidad, a asociaciones sin ánimo de lucro.
Revisión de expedientes
La expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, reconoció ayer durante una entrevista en RNE que durante su Gobierno se le concedieron varias subvenciones a Ausbanc como organización de consumidores tal y como publicó ayer elEconomista. "Se le dio desde la Consejería de Empleo primero y después, desde la de Economía", aseguró Aguirre.
La ahora portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid comentó que "se examinarán esos expedientes, aunque imagino que contaban con el informe de intervención". Aguirre aseguró que tras leer la información publicada por este diario llamó a su directora general de Consumo, quien le aseguró que todos los expedientes "eran perfectamente legales". Aguirre hizo hincapié en que el Ministerio de Sanidad y la Comunidad de Madrid no fueron los únicos que se creyeron a Ausbanc. Recordó que los jueces tampoco se creyeron a un damnificado de Ausbanc que denunció a la organización por extorsión: "Como asociación de consumidores tiene, aunque no debería tenerla, una presunción de veracidad que los que denuncian no tienen", concluyó.
Las palabras de Aguirre sobre Ausbanc contrastan ahora con el apoyo que dio a la asociación en junio de 2012, durante unas Jornadas sobre la Ley de Transparencia Hipotecaria. La expresidenta agradeció entonces a la organización su trabajo "a favor de la transparencia hipotecaria".
Aguirre estuvo entonces con Ángel Garay, adjunto a la presidencia de Ausbanc, y actualmente investigado en el caso. Garay fue detenido el pasado 15 de abril, aunque puesto en libertad provisional tres días después, con la prohibición de salir del país.