A Ikea las lámparas le están saliendo rana últimamente. Tras el anuncio el pasado febrero de la retirada del mercado de sus lámparas de techo Hyby, Lock y Rynna, debido a que se caían las pantallas de cristal y podían provocar daños, la factoría sueca del hogar ha lanzado un nuevo llamamiento a los consumidores para que dejen de utilizar otros dispositivos de iluminación por razones de seguridad.
Ikea ha pedido a las personas que adquirieron los modelos de lámparas de mesa y de pie Gothem, puestas a la venta en octubre de 2015, que dejen de utilizarlas inmediatamente y las devuelvan a la tienda Ikea más cercana, donde le será reembolsado su precio. No será necesaria la presentación del ticket de compra, además.
Según ha informado la compañía en su página web, el montaje de los cables en el interior de las lámparas se realizó de modo erróneo, pudiendo derivar la tensión eléctrica al soporte metálico, que provocaría descargas al ser tocada por los usuarios.
Ikea afirma que no ha recibido informes sobre personas que hayan sufrido daños, pero sí ha advertido la situación de riesgo por incidentes surgidos con dos clientes y un colaborador de la tienda.
La UE analizará el pago de impuestos de Ikea