
La nómina mensual del Estado para pagar las pensiones contributivas está en niveles récord de 8.316 millones de euros, lo mismo que la cifra total de dichas prestaciones (9,33 millones) a cargo de las arcas públicas. Sin embargo, existen datos que certifican cómo en los últimos años, y en mayor medida en los dos precedentes, se ha ralentizado el ritmo de incremento del número de pensiones que debe pagar la Seguridad Social.
Así, las últimas estadísticas publicadas por el Ministerio de Empleo muestran que el número total de pensiones de la Seguridad Social crece al menor ritmo de los últimos diez años: un 1,03% más en tasa interanual en octubre, frente al incremento del 2,36% que se registró en el ejercicio de 2005, y un resultado también inferior al 1,63% de incremento en la suma total de pensiones que se anotó en 2013.
Es decir, las pensiones que entran al Sistema continúan creciendo en número, pero con un avance cada vez menor, lo que representa un ligero alivio para la salud financiera de la caja común del Estado, e indica que las medidas introducidas con la última reforma llevada a cabo por el Gobierno comienza a dar sus frutos.
De hecho, desde mayo de 2014 la variación en la cifra total de prestaciones contributivas que tiene obligación de pagar la Seguridad Social ha sido todos los meses inferior al 1,5% en la comparativa interanual.
Ralentización en la jubilación
Los datos del Ministerio de Empleo, a cuyo cargo está la ministra Fátima Báñez, indican asimismo una favorable ralentización en la cifra de incremento de las pensiones de jubilación.
Más en detalle: en octubre pasado existían en España 5,666 millones de prestaciones de jubilación, tras haber crecido el 1,39% en tasa interanual. Se trata del segundo menor repunte desde el año 2005.
Asimismo, con las cifras de Empleo en la mano, se concluye por tanto que la suma total de las pensiones de jubilación que abona la Seguridad Social se incrementa ahora menos de la mitad de lo que lo hacía hace diez años, ya que en 2005 la tasa de alza interanual de las prestaciones de jubilación fue del 3,06%.
El gasto del Estado se modera
El Estado necesita alrededor de 8.316 millones de euros cada mes para pagar los citados 9,33 millones de prestaciones contributivas que tiene a su cargo. A pesar de lo abultado de esas cifras, lo cierto es que el gasto para sufragar el conjunto de pensiones lleva meses moderándose: en octubre subió el 2,9% interanual, que representa su segundo menor ritmo de aumento de toda la serie histórica que facilita el Ministerio de Empleo.
Las últimas estadísticas oficiales corroboran igualmente que la Seguridad Social encadenó en octubre ocho meses consecutivos registrando un encarecimiento de la nómina mensual inferior al 3%. Esa ralentización en el gasto del Estado es fruto de la reforma del Sistema, llevada a cabo por la ministra Fátima Báñez, que introdujo unos factores de sostenibilidad y según la cual las prestaciones contributivas se revalorizan al año un 0,25%.
Con todo, los expertos alertan de que es preciso profundizar en las reformas para apuntalar la salud financiera de la Seguridad Social, habida cuenta de que en el Fondo de Reserva -la conocida hucha de las pensiones- quedan tan sólo 40.873,84 millones de euros al cierre del tercer trimestre del año. Esto es, una cantidad que alcanza para pagar unas cinco mensualidades.
Según consta en el Presupuesto de la Seguridad Social, el Ministerio tiene previsto sacar del Fondo un total de 8.500 millones de euros este año.
La preocupación por las cuentas del Sistema es evidente. El propio ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha admitido en varias ocasiones que urge revisar las vías de financiación. Una de las alternativas que se barajan es incorporar a los Presupuestos del Estado ciertas partidas, como las pensiones de viudedad y orfandad, que en la actualidad cuestan alrededor de 20.000 millones de euros al año.