Economía

Toni Ferrer (UGT): "El AENC obliga a subir los salarios más que los precios"

En la imagen Toni Ferrer, Secretario de Acción Sindical de UGT.

Secretario de Acción Sindical de UGT desde 1995, Toni Ferrer ha sido uno de los artífices del nuevo Acuerdo Nacional para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), del que resalta, sobre todo, que tiene como prioridad mantener y recuperar el empleo de calidad. Dialogante pero de firmes convicciones y buen conversador, el número dos del sindicato es también consejero del Consejo Económico y Social y miembro del Comité de Relaciones Industriales de la Confederación Europea de Sindicatos.

Tras la firma del AENC, empresarios y sindicatos discrepan sobre la interpretación del "hasta" el 1% y 1,5% en que se fija el incremento salarial para este año y 2016. ¿Cuál va a ser la aplicación real de la subida en los convenios?

Este tercer Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva tiene un punto de inflexión respecto al primero y al segundo y viene, además, claramente determinado por la situación económica que hoy es sustancial y afortunadamente distinta. Mientras el primer acuerdo en el año 2010, que luego fue revisado en 2012, se alcanzaba en un periodo de recesión económica y destrucción de empleo, este tercer acuerdo se produce en un momento en el que sin haber salido de la crisis si hay una situación de mejoría económica.

A partir de ahí, mientras que en el primero y el segundo se fijaban políticas de contención salarial en este se apuesta claramente por una política de mejora salarial. Y esto significa que los salarios tienen que crecer por encima de los precios, y eso es lo expresa el acuerdo. Luego el punto fundamental es que cuando se conozca la inflación de 2016 habrá que hacer una regularización.

¿Estamos hablando realmente de una cláusula de revisión o de una mera recomendación?

El acuerdo en materia de salarios no habla de recomendaciones sino de directrices y una directriz, según la Real Academia Española, es una norma, es para actuar. Por tanto lo que está planteado en el tercer AENC de manera indubitativa es una cláusula de garantía, es decir de revisión salarial.

Parte del Gobierno ha criticado que la revisión salarial acordada no se haya ligado a la inflación de la Unión Europea, lo que puede suponer una merma de la competitividad de las empresas.

En primer lugar, el objetivo central de este acuerdo es el empleo, y eso supone actuar sobre el mantenimiento y la recuperación del empleo y, sobre todo, que el que se genere sea empleo de calidad, propiciando que la contratación habitual en la inserción laboral sea la contratación indefinida para reducir la temporalidad. Dentro de este objetivo es como hay que entender los salarios, que en el acuerdo se referencian a los precios por la realidad de los que tenemos en España y en un escenario de inflación negativa o muy baja.

¿Es este acuerdo una enmienda a la reforma laboral, como afirmaba Ignacio Fernández Toxo durante el acto de la firma?

El acuerdo en su introducción dice que a la hora de producir cambios o reformas el método a seguir es el diálogo y la negociación colectiva. En este sentido, la reforma laboral de 2012 y la secuela de reformas que ésta ha traído se han hecho de forma unilateral por parte del Gobierno. Lo que realmente está planteando el AENC es que la mejor forma de hacer reformas es la pactada. Desde ese punto de vista sí se puede decir que es una enmienda o una llamada de atención.

¿Tanto como para implicar una profundización en la reforma?

Yo lo que pienso es que esta reforma laboral se va a derogar, porque no ha cumplido los objetivos de empleo que se había fijado y, además, ha debilitado la negociación colectiva, colocando al poder público por encima de los agentes sociales e inclinando la balanza en la negociación social hacia una de las partes, la de las empresas.

Desde el punto de vista de la recuperación del empleo, en la CEOE se aboga por potenciar la contratación a tiempo parcial, ¿qué le parece?

Lo que ha hecho el Gobierno con el tiempo parcial es desregularlo completamente. Ha conseguido que sea un contrato a la carta de los empresarios y nuestra apuesta en este acuerdo es corregir ese tema. En el AENC lo que decimos es que el tiempo parcial sirva para eliminar horas extraordinarias y para eliminar contratación temporal.

El contrato único, ¿es una solución?

Yo creo que no. El contrato único no es más que un empecinamiento desde un punto de vista doctrinario que parte de una premisa falsa, como es pensar que la temporalidad en España es una cuestión que está basada en los costes. Pero en España la temporalidad tiene una explicación también desde el sistema productivo.

Aquí predominan muchas actividades estacionales, comenzando por nuestra primera industria, el turismo, en las que se está demostrando en la práctica que no hay que contratar temporalmente, porque tenemos una figura mucho mejor y mas eficaz que el tiempo parcial, me refiero al fijo discontinuo. El contrato único lo único que produciría es una precariedad generalizada, porque no habría ya frontera entre indefinido y temporal. La prueba es que no hay un solo país que haya puesto en marcha el contrato único.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky