
Las comunidades autónomas se han puesto manos a la obra para recortar gastos. Madrid, además de la ronda de privatizaciones parciales en marcha, va a impulsar un plan para reducir la duplicidad de competencias y fomentar la integración de ayuntamientos pequeños. En Cataluña pretenden tener listo su programa de reestructuración de administraciones antes de que acabe el año.
El Gobierno regional madrileño está elaborando un dictamen que debatirán los cuatro grupos parlamentarios en su próxima reunión, prevista para el 22 de febrero. Las decisiones que se adopten serán llevadas a la Asamblea de Madrid, donde serán aprobadas. La iniciativa, propuesta por UpyD, cuenta ahora con el respaldo del equipo de Esperanza Aguirre.
Ante los serios problemas económicos por los que están atravesando algunos municipios de la comunidad, este modelo de fusiones pretende mejorar gestiones y reducir gastos al compartir recursos.
Uniones voluntarias
Según detallan las fuentes populares citadas por ABC, la medida sería voluntaria en todos los casos y permitirá evitar situaciones como la de Parla, donde se están produciendo retrasos e impagos de las nóminas, embargos del patrimonio público, despidos masivos y paros parciales de los servicios públicos. En este punto UpyD califica de insuficiente la propuesta del PP y reclama que las fusiones sean promovidas desde el Estado.
De acuerdo con dichas fuentes, el modelo ideal de integración conllevaría una especie de absorción de municipios de poca entidad por parte de un ayuntamiento grande, aunque añaden que lo más probable es que las integraciones se lleven a cabo entre localidades colindantes.
El dictamen que presentarán los populares ante el resto de grupos parlamentarios de la Asamblea contempla también la creación de un catálogo de servicios en el que se detallen las competencias de cada administración.
El caso catalán
En Cataluña también abogan por este tipo de iniciativas. La Generalitat está ultimando la Ley de Gobiernos Locales para reestructurar las administraciones locales. De esta forma, el Gobierno catalán facilitara las integraciones de municipios pequeños, que podrán unificar la gestión de servicios y sus estructuras.
Según explicaba la vicepresidenta catalana, Joana Ortega, la pasada semana, el reto es abrir un debate que derive en un proyecto de ley que pretenden tener listo antes de que agotar el plazo previsto, que termina este año. El objetivo es dotar "a los ayuntamientos pequeños que no pueden cumplir con toda la eficiencia sus competencias" de una administración que se lo facilite.
Por ahora, la Generalitat ha inciado conversaciones con los responsables de los consejos comarcales para que definan sus competencias, ante la necesidad de establecer "un único ente supramunicipal que pueda mancomunar los servicios a los ciudadanos".