Palma, 19 dic (EFECOM).- El Parlament balear ha aprobado hoy, con el apoyo del PSIB-PSOE, Bloc, Unió Mallorquina y las diputadas de Eivissa pel Canvi, la Ley de Presupuestos Generales de la Comunidad para 2008, dotados con una cuantía de 3.323 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 14,8 por ciento respecto a este año.
Las primeras cuentas generales del gobierno de centro-izquierda surgido de las últimas elecciones autonómicas han sido refrendadas por el pleno tras dos días de debate, en los que los grupos que apoyan al ejecutivo han aceptado sólo dos de las enmiendas presentadas por la oposición a las distintas consellerías.
De hecho, tanto el PP como la Agrupación Independiente Popular de Formentera (AIPF) han votado en contra de la mayoría de las cuentas, al entender el primer partido que no responden a las necesidades de los isleños y el segundo, que no atienden de manera suficiente los problemas de la pitiusa menor.
Sí han dado su voto afirmativo a los presupuestos de la propia Cámara legislativa, la Sindicatura de Cuentas, el Consejo Consultivo, el Consejo Económico y Social y la Oficina de la Transparencia, que se han aprobado por asentimiento.
En el día de hoy sólo se ha aceptado una de las propuestas de modificación que han presentado PP y la AIPF a los presupuestos de las consellerías de Trabajo y Formación, Agricultura y Pesca, Comercio, Industria y Energía, Deportes y Juventud, Asuntos Sociales y Movilidad.
Se trata de una del PP que hace referencia a la continuidad de la gestión de la comisión sociosanitaria, en representación de las consellerías de Salud, Asuntos Sociales, Educación y Economía, enmienda que no tiene repercusión en modificación de partidas presupuestarias.
Ayer, primer día del debate, se rechazaron también las dirigidas al resto de departamentos menos una, referente a la Consellería de Medio Ambiente, que abogaba por articular los mecanismos necesarios para solucionar el problema de los nitratos y cloruros en el agua para el consumo humano.
En la sesión vespertina del debate, Govern y PP se han reprochado mutuamente el cierre del metro debido a las deficiencias halladas en esta infraestructura inaugurada en abril de 2006.
La diputada del PP Sandra Morey ha cuestionado que haya operarios trabajando por la reapertura del metro y que si los hay deben merendar en vez de trabajar, lo que ha sido negado por el conseller de Movilidad y Ordenación del Territorio, Gabriel Vicens, quien ha asegurado que los hay "tanto en la calle como en los túneles".
Vicens ha recordado que el anterior Govern del PP realizó modificaciones al proyecto de construcción del metro "sin justificar", que la diputada del PP ha calificado de "mejores" que tenían el aval de los ingenieros.
Por otro lado, Vicens aseguró que no se han previsto partidas para hacer frente a posibles indemnizaciones por la ley de medidas urgentes para un desarrollo territorial sostenible, entre otras cosas porque nunca se ha previsto una cosa aquí.
Antes, la diputada del PP Cati Palau ha recriminado al conseller de Deportes y Juventud, Mateu Cañellas, que critique el velódromo del Palma Arena cuando se trata de una instalación que "le ha caído del cielo". EFECOM
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