Oviedo, 17 dic (EFECOM).- El director de la Oficina Económica de la Presidencia del Gobierno, David Taguas, ha asegurado hoy que en los últimos trimestres el patrón de crecimiento de la economía española se ha recompuesto y es ahora "más sólido y estable", tras la pérdida paulatina de peso del sector de la construcción.
Taguas ha incidido en que la desaceleración de este sector quizás se esté produciendo de forma "más intensa" de la deseada, pero que todos los analistas querían que se produjese esa recomposición de la demanda, para que otros sectores tuviesen más peso.
La economía española crece con un "enorme dinamismo", ha equilibrado su patrón de crecimiento durante los últimos trimestres y está en un momento "fantástico", fundamentalmente por el clima de diálogo social, "que ha propiciado un marco idóneo para la creación de empleo por parte de las empresas", según Taguas.
"En España no hay en estos momentos ningún atisbo de crisis de ningún tipo", ha afirmado ante un grupo de empresarios y economistas que se dieron cita en Oviedo en la presentación de un estudio sobre la economía asturiana elaborado por el servicio de estudios del BBVA.
En su opinión, hay que tener en cuenta que ninguna economía del mundo ha entrado en crisis con crecimientos de la inversión por encima del 11 por ciento, como es el caso de España, donde considera que sí puede haber una cierta desaceleración.
Taguas ha incidido en que, a pesar de los problemas financieros y desconfianza que hay en los mercados, las economías siguen creciendo a un ritmo "importante" y no ha habido caídas abruptas de las bolsas.
Ha añadido que la economía española tiene "muy buenas bases" para afrontar el momento de incertidumbre actual que, en su opinión, es de carácter "transitorio" y cuyos efectos serán "pequeños".
Entre esos soportes destacó el aumento de las exportaciones y de la inversión, que ha alcanzado unas tasas de crecimiento sólo comparable a la que pudo darse en los años sesenta con el llamado "milagro japonés".
Taguas ha destacado también el "enorme margen de maniobra" de la que se ha dotado la política fiscal y el superávit de las cuentas públicas durante los últimos cuatros años, "que permiten afrontar la desaceleración económica, que no crisis".
En su opinión, los dos próximos ejercicios haya crecimientos menores que en los últimos años y que se desacelere la actividad, pero que ante esa situación, el Gobierno "no tiene que apretarse el cinturón" porque dispone de recursos suficientes.
Un tercer factor para el optimismo pasa por la "solidez de las empresas españolas y de su sistema bancario" que, según el director de la Oficina Económica de la Presidencia del Gobierno, hará que la situación internacional afecte a España menos que al resto. EFECOM
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