
El Gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, ha advertido de que el reciente incremento de las presiones inflacionistas, "aunque tengan carácter transitorio, aumenta el riesgo de su propagación al conjunto de la economía" y ha previsto que los precios no bajen hasta el próximo mes de abril.
Durante su comparecencia en la Comisión de Presupuestos del Senado, Fernández Ordóñez no ha modificado, sin embargo, sus previsiones de crecimiento de la economía española para 2008, y ha asegurado que el PIB se aproxima de forma "gradual" hacia ritmo de incremento "en el entorno del 3%".
En su comparecencia en la Comisión de Presupuestos del Senado, Fernández Ordóñez consideró que un crecimiento como el registrado por la economía española en el tercer trimestre, del 3,8 por ciento, "sigue siendo muy alto y debería de alguna forma desacelerarse si queremos recuperar los desequilibrios".
Según anunció ayer el secretario de Estado de Economía, David Vegara, el gobierno español revisará la previsión de crecimiento de la economía en 2008 al entorno del tres por ciendo, desde el 3,3 por ciento que contempla el cuadro macroeconómico elaborado por el ejecutivo el próximo año.
Competitividad
Fernández Ordóñez ha incidicado hoy que también hay la necesidad de mejorar la competitividad de las empresas españolas, en un momento en el que es "crucial" la aportación del sector exterior y de la inversión productiva para compensar el efecto del menor gasto de los hogares en el crecimiento económico.
El también consejero del Banco Central Europeo volvió a reclamar al Gobierno que aspire, en la medida de lo posible, a lograr un mayor superávit público, y consideró que en la consecución de este objetivo también deberían contribuir todas las administraciones, especialmente las comunidades autónomas.
Fernández Ordóñez comenzó su intervención haciendo de nuevo un análisis sobre el episodio de turbulencias financieras, y consideró que una de las principales secuelas que puede tener en España es "un cierto endurecimiento de los estándares de concesión de financiación a familias y empresas".
También consideró que cuando se supere la "fase más crítica" de este episodio, se producirá una "valoración más ajustada del riesgo" y aumentará la disciplina de los mercados financieros, dado que antes del verano "numerosas voces" advertían de que dichos riesgos se estaban infravalorando en algunos segmentos del sistema financiero internacional. Esto permitirá, añadió, "fortalecer a más largo plazo los cimientos de la economía mundial".
Consumo y construcción
Al analizar la situación económica española, el gobernador señaló que la moderación del consumo de las familias, señaló, refleja la "normal adaptación" de éstas a unas condiciones financieras y monetarias menos holgadas, mientras que la menor inversión residencial responde también al aumento de tipos y a las "menores expectativas de revalorización de precios de inmuebles", a pesar de que el dinamismo de la población tiende a limitar estos efectos.
En cuanto al sector de la construcción, Fernandez Ordóñez ha asegurado que la inversión residencial está moderando su ritmo de avance de forma "algo más marcada", prolongando la pauta de desaceleración gradual que viene mostrando desde principios de 2006.