Chaves aboga por espacio europeo con igualdad en los derechos laborales

Sevilla, 21 may. (EFECOM).- El presidente andaluz, Manuel Chaves, reivindicó hoy, frente a la deslocalización, un espacio "más homogéneo" de derechos en toda la UE con la idea de que las diferencias laborales no puedan ser utilizadas como elemento de competitividad, así como avanzar en la armonización fiscal.

El dirigente andaluz planteó esta demanda durante su participación en el acto de apertura del XI Congreso de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), que se celebra en Sevilla, donde abogó por una Europa que mantenga y refuerce su dimensión social y un mundo más justo y solidario.

Chaves se mostró convencido de que para hacer frente a los desafíos que "imponen" las evoluciones tecnológicas e industriales, los cambios demográficos y la mundialización de la economía, la construcción europea, a pesar de sus "defectos y sus insuficiencias", constituye la "única y fundamental" respuesta posible.

"El modelo de desarrollo y las políticas sociales que seamos capaces de impulsar determinarán el nivel de cohesión social de Europa, pero también la capacidad de influencia de la UE en el escenario de la globalización", aseveró Chaves, que criticó la "paralizante estrechez de miras" de la UE ante los nuevo retos.

Entre ellos, citó la pobreza y la desigualdad y "su corolario" de movimientos migratorios, la discriminación de las mujeres o la respuesta ante el cambio climático y el desarrollo de modelos sostenibles y basados en la innovación, asuntos -subrayó Chaves- a los que el movimiento sindical europeo tiene que contribuir con el "mayor protagonismo".

Sobre las repercusiones de las inversiones en el exterior y de las deslocalizaciones en los trabajadores, el presidente de la Junta comentó que en Andalucía "estamos sufriendo" la crisis de Delphi, en Puerto Real (Cádiz), y después de mostrar su solidaridad con los trabajadores apostó por poner sobre la mesa reglas "claras" que tengan en cuenta los derechos de los trabajadores.

Por ello, demandó un espacio europeo más homogéneo de derechos para toda la Unión, de manera que las diferencias laborales "no puedan ser utilizadas" como elemento de competitividad, y avanzar urgentemente en la armonización fiscal.

Los congresistas, más de 1.000 delegados de 36 países europeos, debatirán sobre del ámbito social y laboral y elegirán al que será nuevo secretario general y al presidente de la Confederación Europea de Sindicatos para los próximos cuatro años. EFECOM

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