
El Índice de Precios al Consumo (IPC) de Estados Unidos subió en junio un 0,7% respecto al mes anterior, y la tasa interanual se redujo hasta un -1,4% desde el -1,3% de mayo.
La subida mensual es la mayor desde julio de 2008, mientras que el dato interanual es el peor desde enero de 1950. Los analistas consultados por Bloomberg esperaban un aumento mensual del IPC del 0,6% y una tasa interanual en el -1,5%.
La inflación subyacente, que no tiene en cuenta los precios de los alimentos y la energía, avanzó un 0,2% en el mes, una décima más de lo previsto, y un 1,7% en tasa interanual, en línea con las previsiones de los analistas.
En junio los precios de la energía subieron un 7,4%, el mayor incremento desde noviembre de 2007, y los de las gasolinas, un 17,3%, el mayor salto desde septiembre de 2005. Los precios de los alimentos se mantuvieron sin cambios el mes pasado.