
Los empleadores pagaron –de media– 768,68 euros al mes en cotizaciones sociales obligatorias por trabajador en el primer trimestre de 2025. Un nuevo récord en esta variable, medida en la Encuesta Trimestral de Coste Laboral del INE y que ha crecido desde 2019 un 24,9% (casi un 25%). Las cotizaciones obligatorias a las que se refiere Estadística en esta encuesta son las aportaciones legalmente establecidas que el empleador hace al sistema en favor de sus empleados, para cubrir: las prestaciones por enfermedad, bajas para el cuidado del menor, accidentes laborales, pensiones de invalidez, jubilación, prestaciones por desempleo o cualquier otra contingencia cubierta por el Sistema de Seguridad Social. En el primer trimestre de 2018, antes de que el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, llegase al Ejecutivo, las empresas pagaban 594,13 euros al mes por trabajador.
Es una de las cuestiones que destaca el informe del Instituto de Estudios Económicos (IEE) en su informe Un crecimiento económico condicionado por un contexto institucional adverso, en el que realiza un análisis de la productividad y los costes laborales.
El aumento las cotizaciones que pagan las empresas viene explicado por las medidas que se han ido implantando en los últimos años como la subida del salario mínimo, la aplicación del mecanismo de equidad intergeneracional –destinado a llenar la 'hucha de las pensiones'–, el incremento de las bases máximas de cotización y la cuota de solidaridad –solo aplicada a los salarios de más de 56.600 euros anuales y en vigor desde enero de este año, también dedicada sostener las pensiones–.
Además de las cotizaciones sociales obligatorias, los resultados de la encuesta sitúa el aumento del coste laboral en los primeros tres meses del año en el 3,8% (respecto al mismo periodo del año anterior), en 3.124,55 euros por trabajador y mes. Además, el coste salarial –comprendido en el laboral– también creció un 3,8% hasta los 2.290,46 euros.
Al comparar estas cifras con 2019, el coste laboral aumentó un 22,5%, "fruto de un incremento del coste salarial del 22,1% y de un 23,7% en el caso de los otros costes", detalla el centro de estudios.
Por otro lado, mientras el coste derivado de las cotizaciones sociales ha aumentado en los últimos años –destaca el centro de estudios–, "la productividad por ocupado ha registrado crecimientos muy discretos". Además, en el primer trimestre la cifra de productividad registró un descenso del 0,2%. La primera variación interanual negativa desde el primer trimestre de 2024. Una situación que, según el IEE, "perjudica la competitividad de las empresas españolas frente a los competidores".

Esta es, precisamente, una de las quejas recurrente de la patronal, que asegura que, para estimular la inversión, consolidar los avances en el empleo y frenar su desaceleración, "resulta imprescindible evitar la proliferación de anuncios de cambios normativos, que generan incertidumbre, rigidez y mayores costes".
Por otro lado, según las últimas cifras de Eurostat –que marcan como referencia el año 2020 y que muestran la evolución a del coste total, por hora–, el coste crece más en España que en otras grandes economías de la eurozona como Francia o Italia. No obstante, también lo hace menos que otros países como Alemania, Grecia, Bélgica, Irlanda o Portugal. En concreto, desde 2020, esta medida marca un crecimiento del 15% para España.
Los ingresos de la Seguridad Social crecen un 42,8% desde 2019
Al mismo tiempo, las medidas llevadas a cabo por el Ejecutivo han aumentado los ingresos por cotizaciones de la Seguridad Social. Hasta el mes de junio, el Resumen de Ejecución Presupuestaria publicado por el Ministerio muestra un aumento en los ingresos por cotizaciones del 7,2 % , alcanzando los 87.504 millones de euros (5.843 millones más que el año anterior). En concreto, el MEI, ingresó un 31,8% más, hasta situarse en los 2.374 millones de euros que nutren el Fondo de Reserva de la Seguridad Social.
Además, si se toman como referencia los datos del último ejercicio que no estuvo afectado por la pandemia, 2019, el incremento de las cotizaciones es de 26.208 millones de euros (un 42,8% más). En junio los ingresos por cuotas se cifraron en 14.818 millones de euros, 4.467 millones de euros más que el mismo mes de 2019. En este sentido, cabe destacar que estos ingresos tienen en cuenta todas los pagos por cotizaciones. Es decir, es una cifra bruta se ve impulsada por el aumento en el número de afiliados a la Seguridad Social (que ya llega a los 21.865.503 según las cifras de julio) y que contiene las cotizaciones pagadas por los trabajadores –no solo por las empresas– y por los autónomos (de los que ya se han recaudado 5.722,35 millones de euros en este concepto).
No obstante, a pesar del aumento en los ingresos por cotizaciones, la Seguridad Social todavía necesita ingresos extra para cubrir el gasto derivado de las prestaciones contributivas (pensiones, incapacidad temporal y nacimiento, entre otras). En concreto, en concepto de trasnferencias a nivel contributivo, el Ministerio de Seguridad Social ha gastado hasta junio 91.543,14 millones de euros. Es decir, 4.039,14 millones de euros más que de lo ingresado por cotizaciones sociales –cuyo objetivo es pagar estas prestaciones–. El incremento interanual de los gastos contributivos, sin embargo, sí es menor que el de los ingresos, que hasta el mes de junio aumentaron un 6,14%. El gasto de prestaciones no contributivas ascendió hasta los 10.376,13 millones.