
La Unión Europea ha recibido la notificación oficial de un nuevo arancel del 30% sobre sus exportaciones a Estados Unidos. Este anuncio fue también publicado en su red social Truth. La medida llega tras semanas de negociaciones centradas en sectores sensibles como el de los automóviles, especialmente relevante para Alemania, y el aeronáutico, donde podrían aplicarse algunas excepciones.
Estados unidos ha impuesto un arancel del 30% a las exportaciones de la UE, decisión que ha sido comunicada por el presidente Trump a través de misivas oficiales. La medida se enmarca dentro de su política comercial agresiva y se suma a los aranceles ya impuestos a otros países.
"A partir del 1 de agosto de 2025, cobraremos a la Unión Europea un arancel de solo el 30% sobre los productos de la UE enviados a Estados Unidos, independiente de todos los aranceles sectoriales", ha hecho saber Trump a través de una carta publicada en su plataforma Truth Social y dirigida a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Como ha hecho en días previos con otros países, Trump ha anunciado que dará marcha atrás en su decisión "si la Unión Europea o sus empresas deciden fabricar productos en Estados Unidos".
"De hecho, haremos todo lo posible para obtener las aprobaciones de forma rápida, profesional y rutinaria; es decir, en cuestión de semanas", añade la misiva antes de avisar, también siguiendo el formato habitual que si por alguna razón la UE decide aumentar sus aranceles y tomar represalias, "la cantidad que elija para aumentarlos se añadirá al 30% que cobramos".
La carta se discutirá en una próxima reunión de ministros en Bruselas. Hasta ahora, 22 países han recibido notificaciones similares, con aranceles que varían entre el 20% y el 40%.
Esta decisión será uno de los temas clave en la reunión de ministros de Comercio que se celebrará el lunes en Bruselas. Además de la UE, otros 21 países ya fueron informados de aranceles similares, con tasas que oscilan entre el 20% y el 40%, a excepción de Brasil, que tiene un trato distinto.
La UE insiste en negociar
Bruselas avisa de que el 30% suspendería las cadenas de suministro y avisa con medidas de represalia si la situación lo requiere
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha reiterado al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que Bruselas sigue dispuesta a negociar un acuerdo comercial justo en respuesta al anuncio formulado por el mandatario norteamericano, en el que amenaza con la imposición de aranceles del 30 por ciento a las importaciones de la UE a partir del 1 de agosto, aunque se reserva la adopción de medidas de represalia "si lo ve necesario".
Von der Leyen, tras "tomar nota" de la carta de Trump, avisa de que la imposición de este gravamen "provocaría una disrupción en las cadenas de suministro, a las empresas, a los consumidores y a los pacientes a los dos lados del Atlántico".
La presidenta de la Comisión Europea ha indicado que "pocas economías en el mundo igualan el nivel de apertura y adhesión a prácticas comerciales justas de la Unión Europea", que "ha priorizado sistemáticamente una solución negociada con EEUU", lo que refleja "un compromiso con el diálogo, la estabilidad y una asociación transatlántica constructiva".
Von der Leyen insiste en que Bruselas sigue dispuesta "a seguir trabajando para alcanzar un acuerdo antes del 1 de agosto" pero avisa de que también "tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar" sus intereses, "incluida la adopción de contramedidas proporcionadas si es necesario".
"Mientras tanto, seguimos profundizando nuestras alianzas globales, firmemente arraigadas en los principios del comercio internacional basado en normas", ha zanjado Von der Leyen.
Contramedidas en suspenso
La Unión Europea mantiene en suspenso un primer paquete de contramedidas sobre un volumen de 21.000 millones de euros en compras a Estados Unidos. Esta primera ronda de represalias a los primeros aranceles de Trump quedaron congeladas en abril por 90 días para "dar espacio a la negociación" con Washington, pero se reactivarán en la medianoche del lunes al martes si la UE no acuerda sobre la marcha una nueva prórroga.
El Ejecutivo comunitario, que habla en nombre de los 27 en política comercial, ultima un segundo paquete de contramedidas sobre cerca de 100.000 millones de euros de importaciones estadounidenses y, según fuentes europeas, podrían ponerse en marcha "muy rápido" si así lo decide la UE.
Entretanto, los ministros de Comercio de la UE se reunirán este lunes en Bruselas en una reunión extraordinaria para examinar las tensiones arancelarias con Estados Unidos y calibrar la respuesta, así como para abordar la necesidad de profundizar las relaciones comerciales con otros socios internacionales "fiables".
En la batalla comercial lanzada tras su llegada a la Casa Blanca, Trump activó aranceles del 50% sobre el acero y el aluminio europeo, de otro 25% sobre las importaciones europeas de vehículos y piezas y anunció otro 20% masivo sobre la mayoría de producciones restantes procedentes de la UE.
Con la tregua anunciada hasta el 9 de julio para dar margen a la negociación, el presidente norteamericano mantuvo en realidad los gravámenes sobre acero, aluminio y coches, si bien redujo temporalmente del 20 al 10% los otros aranceles, a los que Estados Unidos se refiere como "recíprocos" aunque no lo sean.