
En 2019, antes de la pandemia, la actividad turística representaba el 14,8% de la producción nacional, el 15,0% del Valor Añadido Bruto (VAB) y el 13,9% del empleo nacional; mientras que en 2023 representó el 15,3% de la producción (430.987 millones de euros);, el 16,2% del VAB (220.893 millones de euros); y además, el 14,6% de los puestos de trabajo generados en el conjunto de la economía estuvieron vinculados directa o indirectamente al turismo.
El sector turístico supera así su efecto multiplicador sobre la economía con respecto a los niveles precovid, según refleja un estudio elaborado por el Servicio de Estudios de Cámara de España y presentado en la Comisión de Turismo de la institución. El trabajo, basado en la Cuenta Satélite del Turismo (CSTE) y el marco Input-Output del INE, analiza el impacto económico del turismo en España entre 2019 y 2023, diferenciando entre efectos directos, indirectos e inducidos sobre tres variables clave: producción, valor añadido bruto (VAB) y empleo.
Esta recuperación no solo se manifiesta en los valores absolutos, sino también en la intensidad de los efectos multiplicadores del sector. En 2023, el multiplicador de la producción alcanzó un valor de 2,14, el de VAB fue de 1,98 y el del empleo, de 2,05, lo que significa que, por cada euro generado directamente por el turismo, la economía en su conjunto creó aproximadamente otro euro adicional de producción y VAB debido al efecto tractor del sector. Además, por cada empleo generado directamente por el turismo, se creó otro puesto de trabajo adicional en el resto de ramas productivas.
El análisis realizado por el Servicio de Estudios de la Cámara de España constata que el turismo constituye uno de los principales motores de la economía española, no solo por su contribución directa al PIB o a la creación de empleo, sino por ese efecto dinamizador sobre otros sectores productivos. Su papel como demandante de insumos hace que su impacto se extienda a toda la cadena de suministro, influyendo en las actividades que proveen bienes y servicios para el desarrollo de la actividad turística. Además, el trabajo evidencia cuáles son los sectores más beneficiados por la actividad turística a través de los efectos indirectos e inducidos. Destacan, por su volumen, la industria alimentaria (en la que el 16,8% de su producción depende del turismo); los servicios jurídicos, de consultoría y gestión empresarial (18%); los servicios administrativos, servicios para edificios y paisajísticos (18,4%) o el comercio minorista (6,5%).
También en el empleo, el impacto es cada vez más importante. Destaca la rama de servicios de seguridad e investigación, que concentra un total de 181.000 puestos de trabajo derivados de los efectos indirectos (145.371) e inducido (35.629) del turismo. Este volumen representa el 18,4% del empleo total de la rama y pone de manifiesto su papel como uno de los sectores de soporte para la actividad turística, canalizando el impacto hacia servicios tales como mantenimiento, limpieza, gestión y apoyo empresarial.