
España ha perdido un 13% en la confianza de los inversores extranjeros respecto al año 2024. De hecho, ha bajado del puesto 9 en el indicador de confianza Kearney al 11. Gregorio Izquierdo, director del Instituto de Estudios Económicos (IEE), que se ha encargado de la presentación del informe de la consultora, ha advertido que lo que más preocupa es "la tendencia a la baja" pues en 2023 nuestro país ocupaba el puesto 8.
El índice indica, asimismo, una pérdida de interés relativo por la Unión Europea en general aunque la apreciación del euro ha cambiado la percepción en los últimos meses. Se ha detectado bajo dinamismo económico, déficit de infraestructuras sobre todo digitales, normativa excesiva, envejecimiento de la población y un conflicto bélico, Ucrania, en el continente.
En el caso de España, la salida del top 10 se debe, según ha enumerado Gregorio Izquierdo, a cinco factores: problemas de inseguridad jurídica, dilaciones y falta de eficacia en los procesos legales; insuficiente protección de los derechos de propiedad, especialmente agudos en sectores como el de la vivienda pues "fenómenos como el de la okupación perjudica muchísimo la imagen de España"; complejidad regulatoria y exceso de cargas burocráticas; insuficientes incentivos fiscales a la inversión directa extranjera; e inestabilidad política, gran fragmentación parlamentaria, corrupción y falta de Presupuestos Generales del Estado.
Sin embargo, el informe y el IEE siguen siendo optimistas respecto al papel que puede jugar el país al disponer de claras ventajas como su posición geográfica y sus recursos naturales, entre los que destaca el clima; el enorme esfuerzo que se hizo en el pasado en infraestructuras; la pertenencia a la zona euro; y un sector financiero solvente, internacionalizado y sólido. Además, se aprecia una alta confianza en el sector empresarial español que se esfuerza por ser cada vez más competitivo, una relocalización en nuestro país , de actividades de vanguardia como los centros de datos, unos precios menos elevados que los de nuestro entorno europeo y oportunidades en diversos sectores como el energético, las telecomunicaciones, la digitalización, la construcción y el turismo.
Emilio Guevara, socio de Kearney, ha asegurado que España tiene "una gran percepción fuera, interesa saber lo que se está haciendo aquí". El puesto 11 del indicador, ha matizado, sigue siendo muy positivo por cuanto es uno de los mejores que ocupa España en cualquier materia comparativa.
Guevara ha subrayado que en el indicador nos ha adelantado Italia y ha destacado los motivos: innovación, gran cualificación de la mano de obra, facilidad para hacer negocios, "que España ha perdido en los últimos años por su inestabilidad normativa en sectores estratégicos y por un mercado laboral que no atrae talento extranjero".